Regla número 1 para hacer una película sobre un libro: Si vas a saltarte partes del libro en la película, luego no hagas referencias a ellas. La gente se pierde.

Hace unas semanas terminé "The Time Traveler's Wife", un libro que engancha, entretiene y además cuenta una tierna historia de amor. Con estos precedentes, y pocas esperanzas me decidí a ver la película. ¿El resultado? Aún peor de lo que me esperaba. Una película sin mucho sentido, que destroza completamente un bonito libro, obviando completamente las partes más emotivas del mismo.

Yo no digo que haya que reproducir el libro fielmente página por página, 400 páginas no pueden resumirse en dos horas de película. Pero si se decide incluir una parte, debe hacerse de forma completa, con sus antecedentes y consecuentes, y por supuesto, sin dejar referencias colgantes.

En resumen, si va a decidirse a ver la película, creo que lo mejor será que lea primero el libro si desea entender qué está pasando, o de lo contrario se quedará con cara de interrogante pensando: ¿Qué está pasando aquí?

¿No os ha pasado nunca que viendo una peli tenéis la sensación de que estáis jugando a un videojuego? A mi me pasó anoche viendo Thor. Llegó un momento en el que no sabía si estaba jugando al Mario Kart, a un plataformero, o estaba en DisneyLandia intentando sacar la espada del rey Arturo de su piedra, pero por más que miraba en mi mano no estaba el mando de mi consola, sindo un gran paquete de palomitas.
Creo que un dos es una nota más que justa para esta película, dejando aparte la trama, no entendí el sentido a los planos en 45º. ¿Se les había roto el trípode de la cámara? Tampoco entendí el exceso de lucecitas que llegaba a ser un poco mareante. Lo mejor debía de haber sido Natalie Portman, pero estaba floja, después de su Oscar se espera mucho más de ella.
En conclusión, una pelicula para pasar el rato, sólo en caso de estar muy muy aburrido.

The answer man es una de esas películas que encuentras por casualidad, ves sin esperar nada y pasas una hora y media con una gran sonrisa en los labios y paz en el alma.
Muy en la línea de "Mejor... imposible" y con una Lauren Graham interprentándose a si misma (otra vez), pero con un papel que le viene como anillo al dedo, sólo se pueden decir cosas buenas de ella.

Es una película para ver en un día de tensión y con ganas de relajarse, de pensar o descubrir que otro mundo es posible.

Como punto negativo, se podría decir que el personaje de Elizabeth no es sino Lorelai Gilmore (Gilmore Girls) con otro nombre y un poquito menos de agudeza verbal. También podría considerarse un poco lenta, sobre todo si no se llevan bien los silencios en el cine. Aunque en mi opinión está todo justificado y necesario.