Ni uno solo de los personajes fue convincente, IMHO. J Lo me saturó con sus acostumbrados mohines, extraña y facilista manera de una excelente cantante para pasar por actriz, que no lo es y no parece que alguna vez llegue a serlo.¡Zapatero a tus zapatos! Jim Caviezel alardea a lo largo de la película, de la mirada que sugiere el título, sin ningún otro esfuerzo. El resto del elenco, todos mediocres, vulgares, aburridos. La música, edulcorada. La dirección, facilista, sin esfuerzos, sin originalidad, sin convicción ni imaginación. Y, también, sin sentimientos de culpa, largó al ruedo esta historia aburrida y se fue a dormir tranquilamente.

Buen comienzo, salvo ciertas exageraciones (protagonista sumiso, suegro feo e irascible con aires de superioridad, suegra muy, pero muy buena y linda además). Forest Whitaker hace de Forest Whitaker.
Lo que sigue ya lo vimos decenas de veces en películas similares.
El final, al que uno llega por curiosidad, es de lo peor que me tocó ver; provoca enojo con el guionista y con el director. Parece filmado en un galpón con cartones pintados donde ocurren escenas inverosímiles, casi infantiles. Mal puntaje a Netflix por ofrecer este bodrio decepcionante.