A los guionistas de Nathan deberían pagarles más y llevarles a un spa tailandes para relajar neuronas y no dejar de hacer guiones. En un día me he tragado las dos temporadas. Algunas críticas hablan de serie para adolescentes...puede que yo aún lo sea. Lo que está claro es que la buena música está presente y el deleite por los anti/super heroes también.

Buenos actores, buen director, que pena todo lo demás. Empieza la película y empiezas a pensar que te has equivocado de sala. Se les fue la mano con tanto ordenador. Eso si, tiene el "todo" para triunfar en las grandes salas: romanticismo abobado, tableta de chocolate, imágenes vistosas y como no, la oportunidad de llevar gafas de sol en una sala de cine. Una gran decepción.