Vi la película por casualidad. Me senté ante la tele y estaban en pantalla Hackman y Freeman con Monica Bellucci de adorno, así que decidí quedarme. La película se hace pesada a medida que pasa el tiempo, ni Hackman ni Freeman rayan a la altura de la que son capaces, de Monica Bellucci ni hablo y el director... en fin, alguien debería decirle a este hombre que las películas tiene un final. Me pareció un final desastroso, más fruto de la incapacidad del director por cerrar la película que de su genio creativo. Para nada sugiere un final probable ni coherente con la trama y, para eso, ya tenemos a David Lynch que si que es un genio. En definitiva, que no se le pueden pedir peras al olmos, pero si al peral. Peral había, vaya si había con dos actores de esta talla, pero de peras nada de nada!