Un 10 y se merece un 20 y más...Pocas veces han coincidido tantísimas cosas en una película para hacerla no ya un clásico y una obra maestra sino un MITO entre el propio cine. Hoy en día es ABSOLUTAMENTE IMPOSIBLE y una AUTENTICA ESTUPIDEZ rodar un remake (odio esta palabra) de esta película porque para empezar: Trata sobre la decadencia de una estrella del cine mudo (Gloria Swanson lo era y hace de sí misma. Hoy en día no vive nadie de la época del cine mudo y en ese punto ya no se puede igualar a esta película) y además Erich von Stroheim que había dirigido a Swanson en su época muda, había tenido además un affaire con ella..como sale reflejado en esta cinta..en fin a vida imita al cine y viceversa..sale también Hedda Hopper haciendo de sí misma, secundarios de auténtico lujo y locura como Buster Keaton..Vamos que el que no la haya visto va al paredón directo. ABSOLUTAMENTE OBLIGADA SU VISIÓN Y REVISIÓN PERIÓDICA, como es indispensable aprender a leer y escribir a un niño.

Sin duda alguna LA MEJOR película de Marilyn Monroe, a pesar de lo difícil (sobre todo por problemas de ella) que fue su rodaje. Estaba embarazada y perdió por tercera vez el hijo que esperaba de Arthur Miller al finalizar su rodaje. Perfectamente dirigida por Billy Wilder maestro donde los hubo, e inmejorablemente rodeada por dos auténticos monstruos de la comedia como Jack Lemmon y Tony Curtis, Monroe se supera a sí misma en esta fresca, divertidísima comedia, con toques de slapstick e innegables referencias al cine mudo y cine de gángsters (no en vano está ambientada en esa misma época), que a pesar de ser un clásico entre los clásicos del cine americano, a envejecido considerablemente muy bien, y es más que recomendable su visionado..yo diría que hasta periódicamente ya que verla una y otra vez no cansa. Ese es un sello indiscutible de las grandes películas.

Aunque esta película ha sido denostada por muchos críticos y gente de cine en general (empezando por la misma Liz Taylor que dice que siempre ha odiado esta película a pesar de haber ganado su primer Oscar con la misma), vista hoy ha resistido bien el paso del tiempo y resulta un acertado retrato de un tipo muy determinado de mujer que ejerce en ámbitos muy concretos de hombres adinerados pero que en su vida privada se siente desdichada y aspira a lo que todo ser humano; amar y ser amada. Liz taylor luce soberbia, interpreta su papel convincentemente, al igual que el resto del reparto, destacando a Eddie Fisher (con quien había tenido un affaire y posterior matrimonio) y a Laurence Harvey. El resto de secundarios no desmerecen en absoluto. En cambio sería de agradecer una remasterización y sobre todo puesta al día de las voces del doblaje (al menos el español) ya que ese punto de la película HA ENVEJECIDO MUY MAL. Por demás recomiendo su visionado.

Una de las últimas y notables colaboraciones en cine de la mítica pareja Alan Ladd y Verónica Lake. Inmejorable guión del afamado Raymond Chandler, llevado en esta ocasión de manera afortunada a la pantalla por George Marshall, la película narra las dificultades personales que encuentran unos amigos cuando regresan de la guerra de Europa. Turbias intrigas amorosas en las que se verá envuelto Ladd en esta ocasión y una maravillosa Verónica Lake como contrapunto a esta interesante muestra de buen cine negro, sin desmerecer en absoluto a secundarios de prestigio por aquel entonces como una fabulosa Doris Dowling en un breve pero perverso papel y unos Willian Bendix y Howard Da Silva más que correctos como co-estrellas de Ladd. Interesante su visionado.

Magistral obra e indiscutible clásico entre los clásicos del buen cine negro americano de los años 40. Diálogos perfectos, escenas muy bien rodadas, la química de la pareja protagonista (un Alan Ladd en uno de sus primeros papeles y una Verónica Lake en la cumbre de su esplendorosa belleza y breve reinado) contribuye mucho a la puesta en escena de esta novela de Grahame Greene titulada (Una pistola en venta) a mi gusto un título mucho más apropiado. Se suele decir que Bogart y Bacall fueron mejores pero Ladd y Lake llegaron antes; en cualquier caso esta pareja tampoco desmerece en nada a la hora de imprimir carácter, intriga e interés en una de las películas de obligada visión para cualquier cinéfilo que se precie de serlo.