Me gusta mirar las críticas y el puntaje de Filmaffinity antes de ver películas. Pero ya me ha pasado varias veces de que o la puntúan muy alto y las críticas la elogian cuando en realidad son un bodrio, o la puntúan bajo y las críticas la defenestran y en realidad son muy buenas películas. Por ejemplo ésta. Algo me decía que era una buena película y con los actorazos que trabajan me dije: "No puede ser tan malo el león como lo pintan". Y efectivamente, Peter Dinklage vuelve a hacer un papel gigante en un film que se las trae. Quizá sea que los críticos esperan demasiado de todo: de la gente, de los trabajos, de las películas y hasta de la vida misma. Yo no soy tan exigente. Un poco de amor, un plato de comida y una ducha caliente para mí basta y sobra para ser feliz, quizá por eso entiendo tan bien al personaje de Del. No se puede confiar en los bancos, no se puede confiar en los gobiernos, ¿por qué se iba a poder confiar en Filmaffinity? Iluso de mí.

¡Qué ensalada! Netflix insiste en lavarnos la cabeza tipo la novela 1984. Inventa realidades "a piacere" que no solo distorsionan la historia sino que, además, nos quieren meter ideología de género (feminista, obvio), inclusiva y LGBT. Ahora les tocó el turno a los vikingos, donde una mujer de origen africano vendría a ocupar el lugar de liderazgo de Ragnar Lodbrok. ¿Una africana líder de los vikingos? Inaudito. Y, además, hay otra mujer, que sería la hija de Erick el Rojo, que tiene en vilo a los curtidos noruegos al punto de hacerse el centro de la historia. Insoportable. Más allá de esto, el casting lo debe haber hecho el primo del productor, porque son actores desconocidos (más allá de alguna cara que nos resulta familiar) y las actuaciones dejan mucho que desear. Nada que ver con "Vikings", la serie anterior, que rebosaba calidad. Bueno, este lamentable producto es lo que nos ofrece ahora Netflix como gran novedad, y el que nos hace dudar una vez más respecto a dejar de pagar el abono mensual y dedicar ese dinero a otra plataforma.

Aunque le empecé a ver con muy pocas expectativas, esta comedia me sorprendió por su sencillez y la gran calidad de sus actores. Me mantuvo entretenido de principio a fin, lo cual ya es mucho decir, y no hice como es común en mí de ver unos minutos y luego dejarlo para otro día sino que me enganchó y la vi hasta el final. Francella, impecable, como siempre; Norman Briski, un espectáculo en sí mismo; Laurita, excelente; Peto, muy bien, y en general el resto del elenco está para sacarse el sombrero. Muy bien también el guion y los efectos especiales. Mezcla rara de Almodóvar, comedia italiana y desenvoltura criolla, este tipo de comedias puede llevar con orgullo la marca de Cine Nacional. Hay que seguir por este buen camino.

Godless es la mejor serie de vaqueros que vi en mi vida, y una de las mejores series de la historia. Vigorosa, visualmente brillante, con actuaciones magistrales, con un ritmo y una acción apabullantes, da pena ver el final. Uno quisiera que ese placer visual durara eternamente, pero esos siete capítulos le dan un toque de heroísmo, algo así como "muere joven y te convertirás en leyenda". La dirección y la fotografía son excelentes. Para ver y disfrutar. Una joya.

Una excelente película que atrapa de principio a fin. Muy bien logrado el permanente clima de tensión entre la parsimonia del sastre inglés y un entorno de agresividad velada. Todo se desarrolla en la sastrería, no tiene exteriores, pero de eso uno se da cuenta ya finalizando el film porque así nos tiene de atrapados esta historia. Como siempre, una buena película se basa en un buen guion, y acá los que se destacan son los guionistas. No sólo está ambientada en los finales de los 50 sino que también por su estilo parece una película hecha en esa época. Vale la pena verla. A mí me encantó.