Para mi gusto resulta muy cursi, pero me gusta que me saquen de la realidad y esta serie lo hizo de forma alegre y me mantuvo pendiente de lo que pasaría en el siguiente capítulo, aunque hubiese giros que me resultasen totalmente forzados.
Y me encanta que sea una serie feminista. Cuando veo en los comentarios quejas sobre el tema me doy cuenta de que es una suerte que la hayan hecho, porque aunque la gente que ya tiene sus prejuicios grabados en piedra siempre la verá ridícula, la gente más joven puede ir acostumbrando su cabeza a algo que no sea una serie con un hombre blanco hetero de 30 años como protagonista, que tenga como "accesorio" a una mujer tonta con 10 Kg por debajo de su peso saludable, que va a gritar para que la rescate si ve una araña (creo que prácticamente todo lo que había en la tele hace 40 años era así, con lo que algunas pensábamos que preferíamos ser como los chicos, y no; es que no queríamos ser como la caricatura que algunos hacían de nosotras).