Parece mentira que alguien sea capaz de hacer cosas tan buenas y cosas tan malas pero malas, esta es una de las últimas, como otro sobre Frankenstein, como otro de un personaje en una habitación haciendo el tonto.

Hacer cosas sin sentido no es arte, hacer cosas sin sentido no quiere decir, mira cómo molo.

Le puse un diez por el final. El monólogo se hace muy pesado. Las caras de la gente que a medida que avanza la conversación van cambiando y miran a su pareja en plan, Esta conversación me ha hecho ver que debo amarte más, dan pena, a mí no me conmueve. Eso sí, el final es genial.

Estoy harto de ver cine que es un quiero y no puedo, bueno, ésta no llega a ser eso.
Se pueden hacer cosas sin sentido pero con sentido, esta no es una de ellas.
No sabes qué les oscurren a los personajes, tampoco pasa nada en toda la película, no terminé de verla, quedaban 15 minutos y no creo que pase nada en ese tiempo.
¿perversiones sexuales, dónde?, será que no he visto la versión extendida (ironía).
cada vez me decepciona más el cine independiente, de serie b y el de z.

Eso es lo que sientes al ver una película como esta, si es que se le puede llamar así. Una película donde no pasa nada, cuando llega la violencia un@ se ha cansado de esperar. La 1era historia, la que es más interesante, no está desarollada, el rollo snuf tarda en llegar, las historias no interesan. No entiendo por qué el cine argentino siempre parece que sea una parodia, parece que sobreactúen.
Pensaba que después de ver Saw8 no había nada peor, me equivoqué.
Se pueden hacer cosas cutres pero con gracia, esto es como algo inacabado, nunca termina de despegar.
Recomiendo no verla.

Algo tan fuerte como la muerte de una persona y más la de un niño no se ve reflejada esa dureza.

Apenas hay asesinatos, a los mendigos se les escapa el asesino de una manera tan ridícula que parece que sean ciegos, parece mentira que la policía no esté al tanto de a lo que se dedican los mendigos, cuando se esconde en un ático, es de chiste que no lo encuentren.

Muy larga, una hora y 50 minutos, le sobra palabrería, le falta acción.

Cuando llega lo interesante según los espectadores ya no interesa lo que diga el acusado, la acusación o la defensa.
Qué oportuna la llegada de la policía, nada creíble, ¿y el juicio final de verdad?
Acabada con prisas y alargada innecesariamente.