Una historia de 3 hermanos (amigos) interpretados por: David Chiang, Ti Lung y Chen Kuan Tai,, el reparto es de lujo y la interpretacion es sencillamente majestousa, David y Chen como deciamos era 2 ladrones y expertos en Artes Marciales que un dia topan con Ma (Ti lung) siendo atracado, pero sin embargo consiguen ganarse su amistad consagrando una impenetrable unión entre ambos.
En el comienzo de la pelicula ya sabremos cual sera destino del mismo, (cosa que no desvelare), pero sin embargo no cambia para nada el rumbo de la pelicula, desde ese momento todo cambia drasticamente, y aquel que parece bueno se convierte en malvado.
Dicta profundamente en los valores de la vida y es una triste historia, de amor, lealtad y poder que hace que nos estremezcamos.La producción por parte de Shaw Brothers es sencillamente espectacular, creando unos escenarios unicos, con batallas imponentes, y luchas en lo alto de colinas con un escenario del oceano de fondo.
Bellos e irrepetibles, el nivel de la fotografia es tal que te sumerges de lleno en el film, el guión es adictivo y sabe completar la tragedia de una buena wuxia (genero de espadas) con la acción del Kung Fu, coreografias a cargo de Lau Kar Leung impecables, se nota que es el precursos y mas grande artista de su profesion, y muy de agradecer ya que muchas de estos films pecan de poca acción o coreografias muy insipidas haciendo que el espectador decaiga un poco por su ritmo.na pelicula explendida que perfectamente podria entrar en mi Top Ten de la factoria Shaw Brothers, muy recomendada para gente que se quiera iniciar en este genero.

mpecable, así podríamos definir a esta película, con un desarrollo y ejecución muy “humilde” podemos dar cuenta en la calidad de los pequeños detalles la grandiosidad del cine de Kung Fu, esta vez The Tournament centra toda su atención en la practica del Boxeo Tahilandes o Muay Thai, un documento gráfico realmente recomendado para los fans que practican este arte marcial que más que por su contenido es en su contexto donde podrán disfrutar de detalles impecables, Huang Feng, su director nunca a llegado a destacar por sus peliculas, sin embargo para mi es uno de las mentes más creativas de principios de los 70′s en Hk, su talento normalmente estaba enfocado a arriesgar y abrir muchas más puertas al cine de artes marciales, el nos trajo toda la inmensidad y belleza en The Himalayan, rodado por primera vez en las cumbres de lo más alto del Nepal y Tibet, nos puso a los más grandes maestros del Hapkido en la mano de Hapkido:escuela de Kung Fu, nos dio la mejor ración del Taekwondo coreano en la que es sin duda la obra pionera de este arte marcial con When Taekwondo Strikes, o por primera vez unió a un antiguo 007 con el cine de Kung Fu en Stoner, Agente Secreto.

Esta vez Huan Feng pone sus ojos en la región de Tailandia para traernos toda la esencia de su arte marcial estrella, pero lo hace con el máximo respeto y con una clase magistral de la apreciación de todos sus matices, es muy importante recordar que estamos en el año 1974 y que es muy fácil echar un vistazo ahora y ver con nuestros ojos que parece poco contundente, nada más lejos de la realidad, son los verdaderos pioneros y precursores de toda una era, arriesgando hasta el limite todos los recursos disponibles sin olvidar nunca las apetencias de los espectadores, eso era cine de kung fu en mayúsculas.

La mayor parte del film se muestra sobre un cuadrilátero, con planos semi aéreos y muy directos, las escenas son básicas para transmitirnos toda la dureza del ring, lo más llamativo es que la mayoría de estos combates no tienen coreografías, de hecho estoy seguro que son prácticamente improvisados, lo que hace aún más interesante su visionado, esto alternándolo con secuencias de acción pura y dura no nos dará tregua durante el film.

Bruce Lee remonta en nuevo un film, como es habitual en su personalidad y ya adquirida una grandísima fama en su país decide volar por libre, lógicamente después del empujón inicial de Raymond Chow en la puesta apunto de su carrera no estaría dispuesto a dejarlo escapar tan fácilmente y así perder un trozo de tarta, Bruce tampoco quería dejar la Golden Harvest hubiera sido un error por su parte, en caso de fracasar o cosechar nuevos títulos podría convertir todo lo labrado en un desastre, así que ambos forman una coalición amistosa para producir la cinta, la única pega de Bruce es que se ocuparía de todo, después de que el público y prensa lo aclamara por méritos propios, Raymond confiaba de pleno en su cualidades, empezando así un nuevo reto para él y el resto del planeta.
Una nueva hoja en blanco, un desafió para el género de acción y un brutal terremoto en lo conocido hasta el momento, pionero no seria la palabra, mas bien visionario, una mente fresca, amplia y llena de sentido del gusto, un combo poco habitual desgraciadamente en Honk Kong, por que seamos sinceros el cine de la pequeña bahía en muchos momentos se ha caracterizado por no querer jugársela, innovar lo justo y machacar lo que triunfó, solo unos cuantos han sido los exploradores capaces de luchar contratiempo para ofrecer al mundo las maravillas de su mente, Bruce era mucho más que eso, consiga llegar donde la gente no pensaba, su cabeza era como un ciclón capaz de inventar a la velocidad de sus pateos.
Está vez aún recien cumplidos los años 70´s en donde un chino y un oriental tenían menos en común que dos burros en misa, consiguió llevar al público Chino una película rodada en su mayoría en un país del cual apenas escuchado de él y rodado con actores de acción americanos, algo de lo que si lo escuchamos ahora sonará a agua pero teniendo en cuenta que venimos en una época en donde para la serie Kung Fu se eligió a David Carradine en lugar de Bruce Lee por que era demasiado “Chino“, era un grandísimo logro.
Lo que además la gente no comprendía que no era una maniobra meramente para el público oriental, sino que se convertiría en un reclamo para la captación del mercado occidental, sin embargo esto no llegó a ocurrir hasta después de su muerte y fue la producción de Warner Bros: “Enter The Dragon” la que realizó el primer desembarco por tierras internacionales, obviamente la fuerza de la productora era brutal y con un simple chasquido de dedos conseguía colocar cintas en todas las salas de cines del mundo.

Ip Man, es una de esas películas que marcan un punto de reflexión para el cine, aunque no oculto con recelo las esperanzas que durante mucho tiempo deposité en que pudiera dar el salto a nuestras fronteras y poder ser disfrutarlo en España como se merece, sin embargo, este ha sido un buen mazazo y un jarro de agua fría para el genero en nuestro país, creedme cuando os digo que si Ip Man no ha llegado a nuestras salas de cine o Videotecas, es que algo asquerosamente podrido huele, y es la muerte del cine de Kung Fu en castellano.
Posiblemente mi punta de vista o enfoque este un poco mas distorsionado que lo habitual al hablar de este film, no puedo negar que los sentimientos y las clases recibidas horas antes de Wing Chun han influido claramente a la hora de valorar esta obra magistral, pero eso es algo que debéis juzgar por vosotros mismo.

Mendigo a la fuerza, supone la incursión de su director Gordon Chan al genero de cine de artes marciales, salpicado entre el drama y el humor, es si duda un apetecible tentempié, divertido, fresco y plagada de detalles fascinantes, no obstante no podemos evitar la indudable comparación con los mejores clásicos de su actor principal Stephen Chow, muy pero que muy debajo de revoluciones amarillas como supuso Shaolin Soccer, o el apabullante éxito en nuestras fronteras de KungFusión.
Tenemos un menú muy bien ordenado, con todos los utensilios perfectamente ordenados y limpios, una materia prima de primera calidad y una cocina en perfectas condiciones para crear una verdadera maravilla en nuestro paladar, Gordon Chan juega con sus cartas pero con mucha moderación cuenta con su ingrediente estrella, y aunque según sus declaraciones este film únicamente esta concebido para su satisfacción personal y que la fama de Chow no le pesa, todos los que conocemos un poquito este mundo, sabemos que no es cierto, hay un fondo bastante espeso, más bien sopesado diría yo, muchas son las cartas las que pone en la mesa y prefiere no pillarse los dedos.
El resultado es bastante moderado, un plato rico, pero poco original de esos que cuando pasa el tiempo no acabas por retener demasiado detrás de cerebro y como una taza de té, acaba ahogándose en lo más profundo del vaso.
Esto es perfectamente normal cuando un film sin medios ni ideas lo ejecuta, pero cuando todo tiene lo necesario para convertirse en un verdadero pelotazo molesta bastante más. Y es que los medios de los que disponemos en pantalla en multitud de ocasiones nos va a llegar a abrumar, una cinematográfica realmente espectacular, planos preciosos, una fotografía de cámara sobre los combates impecables, multitud de soldados oficiales del ejercito militar chino a disposición de su director, un vestuario impresionante cargado de detalles y belleza, un reparto que más de uno quisiera para el y una estrella cómica en plena efervescencia, sin duda demasiado buenas cosas para un resultado que aún que cumple no está al nivel.