Quién iba a imaginar hace algunos años, en plena entrada del siglo XXI, que el fenómeno "X-Men" llegaría tan lejos. Desde luego, yo no. Y no porque no sea una aficionada extrema a estos cómics, sino porque conozco pocas sagas de ciencia ficción que hayan llegado tan lejos y que, a pesar de que se reinventan una y otra vez, no cansan.
"Marvel" y "super-héroes". Me pongo a pensar y no creo que existan dos palabras en toda nuestra lengua que, juntas, generen tantísimo dinero, tanta expectación y sobre todo una combinación tan sumamente perfecta.

Centrándome ahora en el filme, debo decir que me ha sorprendido gratamente. Pienso que este tipo de películas son las más apropiadas para acudir al cine. A pesar de ser una gran aficionada a este arte, tengo que reconocer que se disfruta muchísimo más con películas que poseen tal cantidad de efectos especiales juntos que con ninguna otra.
Quizás existen algunas escenas en esta película que dejan mucho que desear en ese aspecto, pero francamente, han sabido compensarlo, como por ejemplo con actuaciones tan excelentes como la de James McAvoy, en mi opinión "se sale".

También tenemos a un villano, alguien a quién no me esperaba: Kevin Bacon. Kevin parecía estar desaparecido en combate (yo no le recuerdo desde un pequeño papel en "El Desafío: Frost contra Nixon), pero nos ha demostrado que sigue estando en forma, y que puede bordar cualquier papel como este: el de un tío repelente, pedante y pretencioso que da ganas de vomitar con sólo pronunciar una palabra. En conclusión, un buen reparto que, aunque cuenta con muchos actores/actrices en parte desconocidos, no decepciona.

Es esta una película imprescindible para cualquier fan de la saga, y también para todos aquellos a los que os apetece pasar un rato agradable y disfrutar de un tipo de filme que escasea: aquel que no te aburre en ningún momento y que marca la diferencia.

Origen es una película que sobrepasa los límites de lo imaginable y esto sólo podría ser obra de Nolan. Como pudimos ver en "El caballero Oscuro" con el Joker (interpretado indudablemente por el siempre gran Heat Ledger), la paranoia y el caos abundan en este film.
Hartos como estamos ya de tanto film previsible e insípido, Origen hace que nos cuestionemos algo muy importante. Algo que todos tememos junto con la muerte: ¿Es real el mundo en el que vivimos o sólo es producto de nuestro subconsciente?
En un universo en el que todo se desmorona, tu mente te juega malas pasadas y las calles se doblan cual cubo de papel, un grupo de personas (entre ellos el líder, Leonardo DiCaprio) tienen la surrealista misión de implantar una idea (Origen) en la mente de una persona. Todo esto transcurre al más puro estilo Ocean's.
Sería un error dar más detalles del filme en esta crítica ya que, como el propio Nolan expresó, se disfruta más de una película de la que desconoces los detalles que de otra de la cual conoces todo el argumento. Yo estoy muy de acuerdo con esta afirmación por ello sólo me gustaría concluir con que es una película que sinceramente merece la pena ver, con la que disfrutas a cada momento y de la que se puede sacar mucho partido, ya que te hace reflexionar y no te dan "nada hecho" como ocurre con muchas otras. Sencillamente inigualable.

¡Pobrecita Tilda! ¡Y lo que ha tenido que "aguantar"! Solamente por eso debería darle a la película un diez, pero por suerte o por desgracia soy más objetiva.

El protagonismo en esta película (a mi entender) lo acapara el personaje al que interpreta Tilda Swinton. Una abnegada madre que aguanta estoicamente como su primogénito la hace el blanco de sus humillaciones, sus desvaríos, sus insultos y su "juego sucio".

Algo que no llego a entender es el enfoque que le han dado algunos medios de comunicación al filme. No solo es un filme que apenas ha tenido difusión, y esto es algo que juega en su contra, sino que al no querer desvelarnos nada sobre el hilo argumental, nos confunde.
"El malo de la película" (nunca mejor dicho) forma parte de la esta, pero no es el marido de Tilda en la ficción (al que interpreta John C. Reilly) sino su propio hijo. Películas como esta se agradecen, ya que estamos hartos/as de largometrajes que nos hacen entender que la maternidad es genial, pero que si nuestro hijo o hija nace desquiciado, tiene un demonio dentro. Pues bien, esta no es una película de ciencia ficción, con lo cual el hijo de la protagonista (Ezra Miller) no está poseído. ¡Ojalá fuese tan fácil! Y es que encontrar una explicación a por qué este chaval hace lo que hace no os resultará fácil. Os aviso desde YA que desde el minuto en que veáis a este "demoníaco" niño, vais a querer estrangularlo. Así que, si verdaderamente queréis tener hijos/as, no veáis esta película.

Lo más gratificante del filme es el acierto de tratar un tema tan dificil y además dándole este enfoque.

Las interpretaciones no están nada mal, se mantienen en la línea de lo bueno, pero como he dicho Tilda Swinton es la que sobresale. John C. Reilly pasable, pero aprobado. Y la joven promesa Ezra Miller sin duda espectacular, este chico y sus miradas son lo más de lo más en el filme.
Y por último Eva, el personaje al que interpreta Swinton, que se dedica a aguantar, como una campeona; esto es una madre coraje y lo demás son tonterías. Una madre que se hace responsable del "monstruo" que ha llevado dentro durante nueve meses, una madre que llega a cuestionarse si esa maldad característica de su hijo ha sido contagiada ya en el vientre. Como he dicho en el título de esta crítica: LA PROCESIÓN VA POR DENTRO.

Os pongo en situación: 1990, película: "Solo en casa". El prota, Kevin McAllister, lía una que ni Jesucristo el día de La Pasión, y su tío le recalca (a pesar de que él sabe que se ha metido en un follón de escándalo) la mítica frase: "¿Has visto el lío que has organizado?"; frase que, por otra parte, Kevin recuerda a lo largo de la película como un tremendo martillo que golpea su conciencia una y otra y otra vez.

Pues bien, esa misma frase es la que le debería haber dicho Matt King (George Clooney) ejemplar padre de familia, a su mujer, experta también en meterse en follones. Porque esta mujer se sumerge en un profundo coma después de golpearse la cabeza al sufrir un accidente horrible. Y antes de encontrarse en esta difícil situación, deja muchos cabos sueltos y sobretodo muchos problemas a su marido.

¿ Tópicos? Sí claro, ¡los que queráis! Tenemos a un padre de familia, el cual de repente se encuentra "solo" con dos hijas problemáticas a más no poder, mucho dinero, mucho tiempo libre y muchos quebraderos de cabeza (y todo por culpa de esta buena mujer).
Era imposible negar que, a medida que avanzaba el filme, yo no podía parar de encontrar infinitas similitudes con "La vida sin Grace", película protagonizada por John Cusack, con una temática muy muy parecida.

O sea, que yo me pregunto una y otra vez ¿por qué esa definición sobre la interpretación de Clooney en el trailer de esta película? Definían su interpretación como: "El papel de su carrera" o algo así. A ver, quiero hacer desde aquí una pregunta a los responsables de esa descripción tan absurda: ¿Cuántas películas del Sr. Clooney han visto ustedes? Porque, que yo sepa, este actor cuenta con unas 40 películas en su repertorio, y algunas de ellas con papeles mucho más acertados que este.(Ejemplo: "O! Brother" de los hnos. Cohen). Y que conste que no estoy diciendo que su interpretación sea mala, pero no es digna de tanta exageración. Así pues, no me queda otra opción que pensar que simplemente ha sido un truco de marqueting para que el público acuda en masa a las pequeñas y grandes salas.

¿Se deja ver? Claro, un drama familiar con este tipo de pinceladas de humor siempre es una buena opción, pero no exageremos, que los cinéfilos/as 100% como una servidora no nos dejamos nublar la vista con falsas descripciones, tenemos criterio y sabemos más que de sobra que ni Clooney se merece ese oscar, ni este filme se merece estar nominado.

No ha sido el caso. La frase que uso como título de esta crítica, frase que tome de este filme, frase que me llamó poderosamente la atención, carece ahora de sentido.
Parece que Disney y sus proyectos para adultos (primero "Alicia en el País de las Maravillas" y ahora "Tron:Legacy") no quieren despegar, conformándose con estar rozando peligrosamente el frío suelo cinematográfico.
Ya desde el momento en el que supe del estreno de este filme, la secuela de un clásico, comencé a "emocionarme". La idea era buena, y más si tenemos en cuenta los recientes avances en la industria de la imagen (el famosísimo y reinventado 3D). Así pues, comencé a pensar sobre esto: un buen proyecto, un oscarizado actor principal, una gran compañía cinematográfica, efectos especiales inmejorables: ganas de ir a verla!
Conforme avanzaban los días las ganas se mantenían, no aumentaban, ya que no quería llevarme el chasco que sufrí con el filme antes nombrado "Alicia en...". Sin embargo, tras diversas lecturas de críticas, opiniones sobre el filme etc. comenzó a formarse en mí la idea de que quizás, lo único que mereciese la pena de esta película, fuera el 3D, ya que podrían explotar ese aspecto al 100%. Tampoco fue así, ciertamente no pude percibir como me hubiese gustado dicho efecto y mi opinión de que, hasta la fecha, el mejor 3D que se puede ver es el de "Avatar" sigue intacta.
Respecto al argumento no está del todo mal, podría haber dado mucho mas de sí.

Francamente, me gustaría poder tener una mejor opinión de esta película, me gustaría que, cada crítica que hago después de ir al cine a "disfrutar" de alguna cinta fuera realmente positiva. Pero, con todo lo cinéfila que soy, estoy perdiendo la fe en el "buen cine". ¿Qúe está pasando? Estoy realmente confusa...

Hace poco leí en alguna crítica que esta película está hecha para ir a verla al cine, por la cosa del 3D, pero ahora me pregunto ¿Quién, despues de ver esto, piensa así? Una de dos, o mejoran el 3D para no seguir estafándonos (como en "Furia de Titanes, la mayor estafa que he presenciado) o reducen los precios de las entradas. El panorama del cine queda, momentaneamente, cubierto por una niebla sospechosa.