Dicen que cualquier parecido con la realidad….
Todos sabemos que aquí se parodia a García y de la Morena, que marcaron épocas en la radio deportiva de este país y mantuvieron una feroz rivalidad.
Y frente a esta serie, dos tipos de espectadores, quienes vivimos esa época y quienes por su preciosa juventud no.
Como yo me encuentro entre los primeros, he aquí el porqué de mi enunciado ya que ni tomándomelo como parodia o sainete, me ha interesado y mucho menos captado esta miniserie de marras con absoluta falta de rigor y menos mal, que solo eran 6 capítulos, pues bien, ojo al dato, que Movistar ya se ha apresurado a anunciar que no habrá segunda temporadilla, porque deben ser conscientes de que la primera ni se aguanta, con un guion pésimo, ambientación y caracterización ídem donde solo se salva el gran Javier Gutiérrez, solo por él, aguanté tras el primer visionado, los cinco capítulos restantes.
Hay alguna aparición de personajes del mundo del deporte de la época, como el de Jesús Gil, sin duda el más bochornoso de todos.
Pues eso, todo muy cutre aunque se haya pretendido hacer comedia, no engancha ni con cola, ha faltado entre otros rigor y credibilidad, que no es poco, menos mal que los capítulos eran de media hora.
No quisiera finalizar sin desearles muy buenas noches y unos saludos cordiales!

Añeja, pero no como los buenos vinos.
Una música a veces estridente, por momentos irritante, te persigue torpemente a lo largo de todo el metraje, al igual que los ridículos policías que van tras Belmondo y su chica, parecen sacados de alguno de los cortos de Chaplin.
Las dos o tres escenas de acción, puñetazos y disparos son de pueril ejecución. Belmondo, demasiado caricaturesco en su rol de ladronzuelo vividor y que siente tanta fijación por Bogart ya que tan solo abandona el cigarrillo de sus labios, para frotarse el labio superior con el pulgar, al igual que su ídolo.
Por alguna razón, mi intuición me mantuvo sin visionarla hasta hoy, posiblemente no haya aguantado en muchos aspectos el paso del tiempo, aunque los grandes clásicos siempre pueden con el.
He leído a un crítico escribir que si no existiera esta película, no se entendería nada del cine que vino después.
Me sorprende, aunque lo respeto : "De gustibus non est disputandum"
Pero como el que no se consuela.... me quedaré con esa carita tan guapa, de una jovencita Jean Seberg.

¿En serio que el director de Scarface, Carlito´s way, Los intocables, Carrie, etc., ha firmado esto?.
Como en el futbol, cuando un equipo grande baja por sorpresa a la segunda división.
Claro que también esto es un negocio donde se mueve mucha pasta , si los De Niro, Pacino y cia, han descendido y con cierta frecuencia, a rodar mediocridades porque el talón era jugoso, pues porque no también ustedes los realizadores.
Por eso le diría, primero que esta muy bien que admire como muchos de nosotros a Sir Alfred, pero deje ya de imitarlo y sea un poco mas usted mismo. En cuanto a su película, pues si la clasificamos como de serie B, resulta entretenida y se deja ver, cierto que le han puesto unos actores penosos y que a su amigo Pino Donaggio, en quien tanto confia por anteriores colaboraciones (muy bien en Carrie) le ha salido un churro de banda sonora, que lo que ocurre en la plaza de toros de Almeria, es un desproposito tipo "aterriza como puedas", pero estoy convencido de que tras este lapsus, si usted se lo propone, podrá volver a jugar en primera, por aquello de que: quien tuvo….

"UNO TRAS OTRO o POR ORDEN DE DESAPARICIÓN", eran los títulos del film noruego original del que han hecho este remake, y es que esta fórmula es lo más original que descubriréis en este film, que para mí es una grata sorpresa, pues me esperaba algo más cercano a los de serie B de este maduro castigador que ya se ha encasillado en este género de "mamporrear y tirotear" a diestro y siniestro y lo bien que le va, porque el público así se lo demanda.
Pues en eso en la liquidación de uno tras otro, (solo les falta el apuntador), tiene su punto esta comedia negra mafiosa.
No le pidas mucho, disfruta de los preciosos paisajes nevados rodados en las rocosas canadienses, de la maravillosa banda sonora compuesta por el veterano George Fenton y de cómo van cayendo uno tras otro, sin que llegues a perder la cuenta, gracias a esa especie de pronter a disposición del espectador que ira apareciendo en pantalla siempre, eso sí, por orden de desaparición.
Para pasar un rato entretenido.

Me ha impresionado y en cierto modo me ha impactado, y cuando esto ocurre en el cine mucho te tiene ganado ya esa película, pero es que además es un film inteligente elegante incluido en sus escenas más eróticas que no pornográficas y si alguien quiere ver esto último, poca idea tiene del que se hacía para videoclub o ahora para internet. Abdellatif Kechiche, maneja los planos cortos y las escenas de sexo de forma exquisita delicada y nada vulgar y qué bien se transmite la pasión sexual de estas dos mujeres.
Pero la fuerza motriz no hay que buscarla más que en la mirada de Adele (monísima y brillantísima en su interpretación la actriz del mismo nombre y largo apellido griego), que transmite pasión, emoción, tristeza, silencio..., esa mirada por la que nos habla, por eso vemos esos ojos casi siempre en primer plano, porque son la fuerza de su rostro y del lenguaje no oral. También es cierto que esta historia quizás se podía haber contado con algo menos de metraje y que el desarrollo de la misma hubiera sido más proporcionado, porque el final, se me antoja demasiado acelerado.
Finalmente, tampoco me cansaría de ver escenas en las que como también refiere el crítico de filmaffinity, Adele se ajusta los pantalones al caminar, o cuando come con deleite sus “spaghetti” (que al parecer es el plato único familiar).
Es una buena película, pero sobre todo es una película "BELLA"