Seidl es un documentalista frío que retrata con concisión no exenta de cariño nostálgico la vida de una cultura y sociedad en extinción, la de un pueblo en una república ex soviética.
El ritmo lento del filme, eventualmente en tiempo real, requiere buenas dosis de paciencia para llegar al final del metraje. En las postrimerías, y como premio sorpresa, asistiremos al striptease masculino más extravagante y divertido de la historia del cine.
Retrato del final de la sociedad comunista rural que asiste al descubrimiento del derroche capitalista sin envidiar ni pizca el espejismo de los grandes almacenes y los parques de atracciones modelo USA.
Muchos verán paralelismos con la España de los años 40 y 50 en que la brecha social era tan enorme entre el campo y la ciudad causando en fenómeno migratorio que aún no cesa.
Recomendable para historiadores y amantes del cine documental y/o soviético.

Tragicomedia ácida y crítica de la cultura japonesa contemporánea anclada en el capitalismo y la industria del entretenimiento. Cuando el absurdo se convierte en la única salida para mantenerse cuerdo. Tan real como los sueños más bizarros. Me duele la cara de sonreír tanto.

Crónica histórica fiel y directa a partir de las fuentes originales. A través de declaraciones de personas que protagonizaron directamente los sucesos que acontecieron en los 80 en la comunidad gay de San Francisco (California) nos introducimos en un relato apasionante y emotivo. Aunque han pasado 40 años todavía no puede contenerse la emoción y la tristeza por la pérdida de miles de vidas de jóvenes talentosos y prometedores que vivieron la revolución sexual hippie y la lucha por los derechos civiles lgtb contra la puritana administración USA del presidente Ronald Reagan. Narrada con el apoyo de imágenes de la época, la narración mantiene el interés y la atención desde el inicio al final. Francamente recomendable. Eso sí, tal vez su visionado produzca el incontenible derramamiento de alguna que otra lágrima de congoja y afecto.

Padecer el síndrome de Tourette es un obstáculo enorme para un niño en edad escolar y tanto más para un adulto en busca de trabajo y pareja.
La película es un biopic que narra la historia real de Brad Cohen mostrando las dificultades a las que se enfrenta alguien que sufre esta discapacidad y como se enfrentó a ellas.
Hay que hacer notar el enorme y magistral trabajo de interpretación de los dos actores que interpretan a Brad. Hacen que el personaje sea muy creíble y entrañable de forma que el espectador empatiza rápidamente. Los personajes secundarios también desempeñan su papel con eficacia desde los padres de Brad a los niños alumnos de la escuela. Aún a pesar de cierto empalago podemos aceptar que con apoyo familiar y en un entorno amigable es posible un final tan feliz como previsible si hemos leído la sinopsis que desvela absolutamente la trama de la película de principio a fin.
Se visiona con interés y emoción siendo muy recomendable para todas las edades y especialmente para actividades escolares de sensibilización hacia minorías y discapacidades.
El filme cumple una función de instrucción y divulgación y promete un rato entretenido con moraleja edificante!
Es de vital importancia que los profesionales de la docencia y la sanidad conozcan la existencia del síndrome de Gilles de la Tourette para que puedan diagnosticar y tratar de manera temprana cualquier caso con el que se encuentren en su carrera.

Serie instructiva para extraterrestres sobre la cultura dominante en los países capitalistas. Cómo conseguir prestigio en redes sociales es el objetivo de la pandilla multi-racial de niños protagonista. Compendia de forma acrítica cómo la industria del entretenimiento y las marcas que se publicitan en Internet son los únicos elementos de interés para los precoces preadolescentes de 13 años. Con el nihil obstat de Disney Channel pese al lenguaje obsceno pues no tiene mensaje inteligente alguno.