Wesley es un arquitecto de éxito que tiene una aventura amorosa con Annabella. Cometen el error de confesar el tema y hacerlo público. A partir de aquí, todo se gira en contra. Wesley tiene un padre ultra-católico y un hermano drogadicto. Por su parte, Annabella cuenta con un padre y dos hermanos completamente racistas, que la pegan y la expulsan de casa. Finalmente, el padre de Wesley acaba matando a su hijo drogadicto. (interpretado por Samuel L. Jackson). Al final, Wesley acaba confesando a Annabella que lo suyo ha sido un capricho y regresa con su esposa.

Una chica alemana, de nombre Lola, aparece en tres posibles historias. Las dos primeras acaban fatal; en la primera la propia Lola muere, en la segunda muere su novio y en la tercera y definitiva todo acaba perfecto y se salvan los dos y además, con dinero para gastar.

Bien , un ladrón de guante blanco penetra en una mansión de un multimillonario y, una vez dentro, descubre una cámara secreta, en la que entra dentro. Desde su interior, contempla como el presidente de los Estados Unidos, borracho, tiene una pelea con la esposa del propietario de la casa y sus dos agentes secretos acaban por matarla. Desde ese momento, tendrá trabajo para demostrar al propietario quién ha sido el verdadero asesino y al mismo tiempo, salir bien librado.

La película se deja ver bien, siempre y cuando aceptemos el humos americano, que puede ser incluso algo empalagoso. (personalmente prefiero el inglés) Lo que no acepto de ninguna manera es que se muestren sin ningún tipo de pudor las matrículas de los coches en Francia, Inglaterra y Rusia y en cambio tengamos que tragarnos que al principo, en EEUU, no se deje ver la matrícula del coche americano. A ver, quizás piensen que si la muestran, alguien va a coger un avión o un barco, va a intentar buscar esa matrícula en concreto y va a ponerle una bomba. A mí me parece una estupidez. Estupenda la secuendia de Helen Mirren disolviendo con ácido un cuerpo en la bañera mientras habla por el móvil.

Bien, Ray Liotta interpreta a un joven que ya desde pequeño sueña con ser un gángster. Se alía con Robert de Niro y Joe Pesci y hacen dinero de todas las formas posibles.Consigue tener todo lo que quiere. Finalmente las cosas se tuercen y precisamente él es el encargado de traicionar a sus compañeros a cambio de protección. Al acabar la película, sólo se lamenta de una cosa: "Ahora soy un tipo qualquiera y ya no disfruto de ninguno de los privilegios de los que tenía antes".