Al cine y a la literatura le encanta la idea de la existencia de que tenemos un doble.
Uno que va por el camino seguro de la vida y otro por los más enrevesados.

La inspiración de Buñuel está presente en el titulo y en el desarrollo, pero se queda ahí su parecido.

El personaje principal de Ana, es lo mejor en una película que decae momento tras momento. Unos secundarios flojos y esas escenas de cabaret (podría haber dado mucho juego) donde la producción recorto todo lo posible y más.

Pronto pierde todo el sentido de tener un doble que ocupe tu vida, para ser una película que se pierde en su idea, con un giro de la intriga muy pobre.

Otras más de esas películas que aparecen en el Festival de Málaga que no aportan nada.

Nominada al Oscar en 2020 la película recrea el asesinato de 8500 personas cometido por las tropas serbias en 1995 en la ciudad de Srebrenica el mayor genocidio tras la Segunda Guerra Mundial en Europa.

El genocidio fue llevado a cabo en una zona previamente declarada segura por las Naciones Unidas que contaba con la supuesta protección de 400 cascos azules holandeses.

Remueve y mucho, sin una sola escena desagradable estremece y mucho.
Rehúye la violencia explícita, pero el horror está ahí, en el rostro de personajes, en el fuera de cuadro, en sonidos…

La directora se basa en conversaciones con familias de asesinados en el genocidio, y a partir de ahí construye la historia principal, basada en un traductor que no volvió a ver a su padre y hermano.

Hoy, más de un 70% de sus vecinos son serbios cristianos. La población de Srebrenica, antes de la guerra, era en más de un 80% de etnia bosnia musulmana ¿Se puede perdonar? ¿Pueden convivir en el mismo lugar gente que se hizo tanto daño? El plano final sobre este tema es lo mejor.

Ana una joven que va a tener su primer hijo y aterrada, coincide en la habitación del hospital con Janis, una mujer madura que va a ser madre al mismo tiempo. Sus historia similares, les hace coincidir en diferentes etapas de la vida, aun así se crea un vínculo difícil de romper entre ambas.

Es una de las películas de Pedro Almodóvar que menos me ha gustado, ese batiburrillo de temas que quiere tratar sin centrar la trama MAL. Parece que no controle ninguno de los temas que quiere tratar: maternidad, memoria histórica, niños perdidos, la relación amorosa metida con calzador…

Lo mejor: Penélope Cruz, de lo poco salvable de todas las historias entrelazadas.
Lo peor: No sabe Almodóvar donde poner el foco real a la historia.

Adaptación de las memorias de Marilyn Monroe imaginadas por la escritora Joyce Carol Oates.
En el libro, deja claro que toma las licencias que le apetecen y explica que de los escritos de Marilyn, diarios, poemas y fragmentos solo utilizaba UNO original. El resto son inventados por la escritora.

Esta peli necesitaba en Grande un "basada muy libremente en la vida de Marilyn Monroe" En ningún momento esto puede ser considerado como un biopic.

Hay que reconocerle a la película que ha sabido desde el principio buscar el morbo, y es su bandera para llamar la atención.
La mayoría de gente no indagara en el personaje, ni en saber que es real y que no.

El interés del director es simplemente representar momentos icónicos de fotos del personaje que todos conocemos y recrear sufrimiento, humillaciones y maltrato.
Los cambios de color y formato se usan sin ningún interés ni relación.

Ana de Armas en este circo del morbo intenta crear los pocos momentos que le dejan un personaje creíble, lejos de ese Oscar que dan por seguro muchos.
A destacar la recreación de La tentación vive arriba o Los caballeros las prefieren rubias de Howard Hawks, a mi parecer muy desaprovechados.


Me sorprende con que desprecio trata el director al personaje, fue activista antinuclear, busco controlar su carrera y como desaprovecha el momento más interesante, cuando se casa con Arthur Miller, y su interés por el teatro.



Lo mejor: Ana de Armas que encuentra un papel como anillo al dedo.
Lo peor: Todo lo morboso y grotesco usando un personaje tan conocido.

Juan, funcionario de prisiones, se cruza cada domingo con Berta, madre de un preso. Un día que entablan conversación se hace pasar por otro padre.

La mentira inocente crea una situación curiosa, entre dos personajes que se sienten solos. En ciertos momentos, los silencios hablan más que los personajes.

Nominada a 3 Goya, tuvo un recorrido corto en cines, la tenéis en Movistar y es bastante cortita.

Lo mejor: Los actores principales.
Lo peor: En ciertos momentos algo surrealista.