Tenemos a un sicario de la mafia retirado durante muchos años de la acción, viven apartados con su mujer y su hija, porque se cargó al hijo de otro mafioso y su padre lo busca, con tan mala suerte que la niña le hace una foto y la sube a las redes sociales. Los localizan y se cargan a la madre, a partir de aquí viene lo clásico, los persiguen, la niña como es un poco rebelde llama a un amigo y por su culpa el pegan un navajazo al padre. Mal herido busca ayuda y como la farmacia de guardia está cerrada hay un centro de masajes chino que sí está abierto, estos italianos son unos saliditos ehh, les ofrece dinero y lo llevan a un hospital chino clandestino, allí lo grapean, y a seguir matando malos.
Secuestran al hijo del mafioso y manda a todos los sicarios a por el padre y la hija, se los carga a todos y después va a por el mafioso, que aunque está en las últimas le pone una corbata un poco apretada y lo ahoga.
Llega la policía y aunque se ha despedido de la hija, va a sacar las llaves de la fragoneta para regalarles unos melones y unas naranjas a la policía, y al pobre lo reciben a balazos.
El hijo del malo se salva y va a ver a la niña para fumar la pipa de la paz, pero como la niña a aprendido que en el mercadillo hay que regatear para poder vender los productos, va a verlo al despacho y le hace un piercing en la lengua sin anestesia.
Hasta la próxima crítica con humor.

El doble de algo pasa con Mary, es un pringado de cuidado, el único que se queda atrapado en las plataformas que caen como piezas de dominó, pero como tiene a la mujer aquaman que va a rescatarlo, no hay problema, el pobre es tan torpe que una vez rescatado se vuelve a pegar otro mamporro y si no es por Sofía se queda como Di Caprio en Titanic, un cubito de hielo.
Con hombres así viva el feminismo.

Pues tenemos a una pareja, un calzonazos de cuidado que se quiere divorciar y no sabe como decírselo, porque ella esta sacada del manual de tía insoportable, en una boda creo que era pone a gritar en plan histérica para ver cuantos sagitarios hay, tierra trágame, me ha dado hasta vergüenza ajena. Como el marido no sabe que hacer para quitársela de encima, contrata los servicios de un gigolo, o algo parecido, tiene más posibilidades de ligar Paquirín que Hugo Silva en una fiesta de Play Boy. También como la chica curra menos que un parado en navidades, le busca trabajo en una emisora, pagando todo esto de su bolsillo, y claro al final le sale el tiro por la culata, la insoportable le sale bien la jugada sube como la espuma y lo termina dejando al calzonazos.
El calzonazos se da cuenta de que la quiere e intenta remediar todo el pifostio que ha liado, pero ya es tarde y le da la patada Charlot.
Pues ya está, no hay más que contar, si os interesa la veis, no os va a aportar gran cosa, pero al menos estáis advertidos.
Hasta la próxima crítica con humor.