Haz click aquí para copiar la URL
España España · Santander
Críticas de Maria
<< 1 2 3 4 10 14 >>
Críticas 66
Críticas ordenadas por fecha (desc.)
5
24 de febrero de 2016
8 de 11 usuarios han encontrado esta crítica útil
Es más que evidente que Charlie Kaufman tiene debilidad por las películas sobre el hastío vital o la apatía. No hay más que ver sus dos únicas realizaciones como director, "Synecdoche" y "Anomalisa", que tratan ambas sobre el mismo tema. Además está "Adaptatión", que también da vueltas sobre lo mismo, película en la que, el ahora realizador, actúa como guionista.
Para el que necesite alguna otra referencia, se podría decir que Anomalisa es una suerte de “Lost in translation” en stop motion.

La verdad es que ninguna de estas cuatro películas me ha gustado. En el cine de “temática existencialista”, por decirlo de alguna manera, es muy importante compartir las inquietudes que el realizador nos presenta, y este no es mi caso.

Aun con el aburrimiento que a mí me generaron no sería capaz de calificar ni "Synecdoche" ni "Anomalisia", en especial esta última, como malas películas. "Adaptation" sí la dejo de lado. Ambas transmiten perfectamente las inquietudes del director y además, en la última, Kaufman se ha superado. Si "Synecdoche" era insufriblemente larga "Anomalisa" acorta el metraje hasta la duración perfecta, una hora y treinta minutos de tedio vital es soportable, pero más es agotador.

Por otro lado el apartado técnico de "Anomalisa" es fantástico. Pocas películas de “stop motion” son capaces de transmitir tan bien los detalles emocionales a través de los rostros. No es que "Synecdoche" en lo técnico fuera reprochable, pero tampoco tenía la magia de los muñecos animados. La película de animación crea una atmósfera de cansancio y aburrimiento perfectamente orquestada. Además, el hecho de utilizar “muñecos” permite recurrir a técnicas como el doblaje con la misma voz de todos los personajes, que ayudan aún más a mostrar monotonía.

"Anomalisa" es una cinta que puede gustar mucho, a aquellos que se vean atraídos por su temática. Pero, al final, una película sobre el hastió vital busca transmitir tedio y desesperanza. Y esto, en última instancia, significa aburrimiento para el espectador. Por eso es obvio que ni "Synecdoche" ni "Anomalisa" van a conseguir divertirnos. Lo que si podrán conseguir, si estamos abiertos a ello, será plantearnos cierta reflexión vital.
Maria
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
10
11 de noviembre de 2015
2 de 4 usuarios han encontrado esta crítica útil
Para mi “La noche del cazador” es una de esas aventuras mágicas que, sin contar con una trama extraordinaria, consiguen hacerte sentir y viajar. Y al final esa sensación de estar en otro lugar, en otra época o en otro universo es de lo mejor que ofrece el cine.

Lo principal de la película es su atmósfera. La fotografía es genial, y el hecho de mezclar la estética del cine negro con unos decorados rurales me parece especial. Además, el buen ritmo consigue el suspense necesario para completar el thriller.
La historia transporta totalmente a la infancia. Una infancia oscura sí, pero a la vez feliz y emocionante. Una infancia de miedos y aventuras. Un sueño rural y salvaje.

Hay que reconocerle el mérito a Laughton, que da un giro al género y crea un producto con una estética y ritmo adultos pero con alma inocente.
Es un punto de vista totalmente personal, desde luego, pero espero que mucha más gente pueda disfrutar de este cuento infantil como lo he hecho yo.
Maria
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
1
10 de noviembre de 2015
15 de 20 usuarios han encontrado esta crítica útil
Se abre el telón. Aparece una joven en lo alto de una catedral. Parece confusa y asustada.

(¡Madre mía! Ha saltado)

Choca contra el suelo. Se oye el crujir de sus huesos bajo su peso. Parece que se ha roto algo. Si, se ha roto la pierna izquierda. Todas las luces del teatro se dirigen hacia ella para que podamos verlo bien. Hay mucha sangre, mucha mucha sangre. Es una herida abierta. El extremo astillado de la tibia asoma a través de la piel. La joven aun confusa comienza a revolverse, empieza a tirar del extremo libre del hueso. Parece que intenta arrancárselo.

(¡Joder, que desagradable es todo esto! Espero que tenga un por qué)

Ha conseguido separar la parte distal de la tibia y ahora se hace cortes en los brazos con el hueso astillado. Hay mucha mucha sangre, además parece que a ella le gusta y se restriega las manos sangrientas por la cara y el pelo para empaparlo.

(¿Qué coño hace? Parece que está intentando partirse la otra pierna. Obviamente con un trozo de hueso le va a resultar imposible. Va a ser aun más desagradable que hacerse el Harakiri con una espada de bambú.)

Entonces una mujer muy delgada con un pañal de acero y un escurridor metálico en la cabeza aparece por la derecha del escenario, se acerca a la joven y le entrega una sierra. Por fin con esta herramienta consigue mutilarse la otra extremidad.

(La verdad, no sé qué clase de espectáculo enfermizo he venido a ver)

Aparecen unos hombres vestidos de negro, uno lleva unas tijeras y el otro unos potitos del “Baby Born”. Se ponen a alimentar a la joven y a cortarle el pelo a lo “Miley Cyrus”. Después se dedican a darle palizas. Pero no una ni dos, muchas muchas palizas. Tantas que he tenido que dejar de mirar en varias ocasiones. Esto resulta insoportable.

De repente la chica abre mucho mucho los ojos. En plan como se hubiera visto a dios. La sala entera suelta un “Uoooohhh” de admiración. (Yo sigo flipando, no entiendo absolutamente nada.)
Los hombres de negro se alejan satisfechos. No sin antes darle un orinal a la chica por si tiene pis ¡hay que ser considerados!.

Ahora aparece en escena una señora gorda con un bate de béisbol en una mano y una especie de biblia en la otra. (Miro a mi alrededor, todos los asistentes están entusiasmados y concentrados. Yo no sé si estoy más desagradada o aburrida.)

La señora gorda empieza a hablar.

- Hemos descubierto el destino del universo. Las luces señalan el camino a seguir. Un koala se ha comido mi almuerzo…

(No entiendo nada pero la verdad es que me siento aliviada de oír al fin algo de diálogo.)

- … Como ya dijo en su día el gran “Don Omar”: “Amaneció bajo las alas de la muerte, aquellos brazos de hombre que la aprietan fuerte…

(¡Jaaaaajajajajaja! Suelto una sonora carcajada. ¡Si al final resulta que todo era una broma! La verdad es que no la pillo muy bien pero bueno...)

Varios asistentes de mi fila y la siguiente se giran hacia mí con cara de pocos amigos y me mandan callar. Parece que no tocaba reírse. Miro a mi alrededor y el público sigue muy atento y emocionado, algunos incluso con lágrimas en los ojos.

- …todavía le late el alma y el corazón no lo siente... y vuela vuela vuela, angelito vuela”. Hemos llegado al final, el destino está escrito.

La señora gorda coge el bate, se golpea con él en la cabeza y cae inconsciente.


La sala entera se pone en pie y rompe a aplaudir. El telón se cierra.

Yo no espero más y me marcho. No entiendo lo que acabo de ver. No sé qué me parece peor si la hora y media de violencia y desagrado gratuito, el aburrimiento por la falta de argumento o ese final al estilo “Into the Woods” pero, en este caso, pretendidamente serio.
Al final va a resultar que “Gaspar Noe” no era tan malo.
Maria
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
4
4 de noviembre de 2015
39 de 55 usuarios han encontrado esta crítica útil
La nueva película de Jonny Deep es una copia cutre del gran cine de mafias. Cuando se han hecho tantas y tan buenas películas de este género es difícil conseguir un producto que sobresalga. Sin embargo, no debería ser tan difícil crear un producto pasable, porque es sencillo copiar las fórmulas de los maestros y crear algo, aunque no original, si entretenido e interesante. Al fin y al cabo los buenos aprenden copiando a los mejores.

Pero, en eso de imitar, esta película se pasa de rosca. Y es que “Black Mass” es tan típica que parece una caricatura, una burla a los tópicos del género. El exagerado personaje de Deep recuerda al “Ghostface” de “Scary Movie”. Los diálogos plagados de palabrotas suenan totalmente forzados. Los personajes siguen absolutamente todos los clichés propios de su papel. Incluso la estética, la forma de dirigir y, sobre todo, el montaje son definitivamente repetitivos.

Por otro lado, una de las características más destacables de este género es la complejidad de sus guiones. Y, por desgracia, esta es la única fórmula que no se repite en “Back Mass”. La historia es totalmente básica, no se centra en ningún tema en concreto, no concluye ninguno de los frentes paralelos al hilo principal, no profundiza en la personalidad de ninguno de los personajes, no se trabaja las situaciones lo suficiente como para que resulten realistas. En definitiva, carece de ese distintivo tan atractivo de esta clase de cine.
Acaba la película y nos damos cuenta de que el narrador que comenzó a contárnosla no pinta nada, no sabemos que sucede con el hijo de Whitey, ni con la mujer de Connolly, no se nos muestra ningún trabajo que realice la banda criminal. Al final, han pasado dos horas y seguimos sin saber nada. Nos han contado la “historia real” de Whitey Bulger pero podría haber sido la de cualquier otro.

Podríamos resumirlo todo diciendo que “Black Mass” es cine de mafias sin carisma. Es al cine de Scorsese lo que “Scary Movie” es al cine de Wes Craven
Maria
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
7
26 de octubre de 2015
4 de 6 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace tiempo que me debato entre el amor y el odio por Christopher Nolan. Amor por la capacidad de realizar películas de entretenimiento en el 100% de los casos. Odio por su pretenciosidad y su incansable intención de vendernos lo que no es.

Priest, el escritor de “El prestigio”, tiene un calificativo para su saga de Batman: «vergonzosa». Y se explica: «Tengo niños a los que les gustan los superhéroes, y piensan que las películas de Batman son aburridas y pretenciosas. Les gustan cosas como Los Vengadores y Iron Man porque son divertidas. Es un error coger a un superhéroe y darle un realismo psicológico. Es un culturista que salta desde edificios».
La verdad es que, aunque a mí no me resulta más aburrida que cualquier otra saga de superhéroes, sí que comparto la idea de que el superhéroe de Nolan, por mucho que él lo pretenda así, no es más emocional, ni más complejo, ni más metafísico que cualquier otro, “es otro culturista más que salta edificios”.

El director se toma a sí mismo y a su personaje demasiado en serio. Los superhéroes son comics, y la mayoría de directores lo saben, con lo que no pretenden dar un realismo imposible a la historia, ni una psicología absurda al personaje. En las películas de Batman de Tim Burton, no entro a valorar si mejores o peores, no se pretendía engañar a nadie. Incluso la ambientación gótica hacía referencia a que se trataba únicamente de la adaptación de un cómic, y que los personajes no debían ser tomados muy en serio, sino que era algo más bien correspondiente a un juego, al que se jugaba entre los adaptadores de un comic y los espectadores. En las de Nolan se da a los personajes una apariencia humana, se mezclan secuencias de apariencia realista con otras de pura fantasía y se pretende que hasta el público se identifique con secuencias pretendidamente dramáticas. Algo, bajo mi punto de vista, tan absurdo como falso.

Nolan jamás es sincero en su cine. Hace películas de puro espectáculo y nunca es capaz de presentárnoslas tal y como son. Continuamente adorna sus producciones con planteamientos pseudofilosoficos, falsa psicología, metafísica... Intenta dotar de características profundas a historias que ni las tienen ni tendrían por que tenerlas. Porque el cine de Nolan es, por mucho que intente ocultarlo y adornarlo, simple acción y diversión.
Y es que director nunca cambia su género. Roza diferentes temas pero al final le sale la misma película con otro escenario. Ha pasado por la ciencia ficción filosófica, por el mundo onírico, por la profundidad psicológica… pero siempre de puntillas y sin mojarse. Porque cualquiera que haya visto una película real de cualquiera de esos géneros: 2001, Blade Runner, Mullhollan Drive, El quimérico inquilino, Gran Torino…se dará cuenta de que nada tienen que ver con Interestelar, Origen, El caballero oscuro o cualquier otra del director. Y es que, como he dicho, todas sus películas responden al mismo género: Acción.

Y dios me libre de criticar el puro espectáculo o las películas de acción, porque al final el cine, además de arte, es diversión. Pero nadie cuando va a ver “Terminator” piensa que está viendo cine metafísico; porque Cameron es sincero con su público. Tampoco nadie cuando ve una película de Spielberg (maestro del cine entretenimiento) se plantea que haya profundidad más allá de lo que ve.
Pero es que el problema de Nolan no es en absoluto su incapacidad para entretener al espectador, ni para manejar la cámara. No creo que nadie niegue que en lo técnico es de los mejores. Su problema es su pedantería y el inagotable intento de engañarnos con blockbusters que son más de lo mismo solo que con historias más completas y mucho mejor realizadas.
Maria
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
<< 1 2 3 4 10 14 >>
Cancelar
Limpiar
Aplicar
  • Filters & Sorts
    You can change filter options and sorts from here
    arrow