A ver, está claro que se trata de una pelìcula claramente serie B; una vez dicho esto, en mi opinión no es tan mala como se la ha retratado en la otra crítica, anterior a la mía.

Estamos en una situación absolutamente histórica, encerrados en casa (confinados) por el coronavirus, y este film al menos me ha hecho pasar una hora y media amena, no es un peliculón pero se deja ver gratamente. No tiene nada que ver con la recientemente programada en este mismo canal (TPA) "Para mi el oro y para ti el plomo". Eso sí que fue abominable, a los 15 minutos dejé de verla.

Ciertamente, su argumento es bobalicón, y con eso no se puede hacer una gran película de ningún modo. No creo que la fotografía sea tan mala, ni la música, ni nada.

La puntuaría con un 0, pero le doy el 2 sumando un punto para las actrices protagonistas y otro por la fotografía.

He aguantado hasta el final con el único fin de tener conocimiento de causa sobre la película para poder contrastar las opiniones y poder plasmar la mía; de otra manera a los 15 minutos hubiera dejado de verla.

Las coreografías son muy simples y con poca gracia.

La forma de hablar de Belén Cuesta da un poco de grima.

El personaje divino es demasiado viejuno para ser aceptado favorablemente, da algo de pena.

Si valorase los efectos especiales, le pondría un 10.
Pero no, señores, yo deseaba ver una película y no una continua exhibición de fuegos de artificio.

No entiendo cómo le han podido poner hasta dieces críticos anteriores a mí, afirmando que es un excelente film.

No soy capaz de continuar viwndo esta porquería de película, y solo lleva 15 minutos de metraje.

Creo que hay mucho freaky comentando en esta plataforma.

Mis queridos amigos lectores: esa frasecita que he puesto de título a mi crítica es una de las escasas frases con gracia oídas en la película, y puedo asegurar que es de las mejores, con lo que os doy un aviso sobre el ínfimo nivel del resto.

Película absolutamente prescindible, no se entiende cómo le ha podido gustar al crítico chicodenaranja, si ni siquiera le ha gustado a su propio director y responsable del bodrio, Carlos Auride. A poco que busquéis en la biografía de Auride veréis que renegaba de estas películas serie B eróticas que solo firmaba para poder comer.

Tengo el DVD que compré hace un tiempo en alguna gran superficie en la que me imagino que estaría de oferta, y que por eso lo adquirí.

Desde luego, no me extraña esa oferta, y es que su interés es mínimo, por no decir inexistente.

Tan solo la protagonista femenina hace que el film me mantenga con cierta atención frente a la pantalla, porque los masculinos son bastante patéticos.