Este documental, realizado por estudiantes de economía, contrapone la postura de los economistas mediáticos, que desde la crisis nos han inundado con sus discursos favorables a los llamados ajustes y recortes, con otras voces que nos hablan de otra manera de hacer y ver la economía. Así, encontramos a economistas feministas, miembros de la PAH o grupos de economía crítica. Conjuntamente, todas estas personas nos responderán:
¿Qué hay detrás de la mayoría de discursos de los economistas mediáticos? ¿Tienen estos discursos un interés? ¿Es la economía una ciencia objetiva? ¿Hay otras maneras de hacer economía? ¿Cómo se enseña en la universidad la economía?

Para mí, uno de los mejores documentales sobre economía. Se discute y contrastan diferentes teorías económicas sin necesidad de tecnicismos ni explicaciones complejas. Y no se citan porque no es necesario, pues veremos que se trata de un conocimiento altamente influenciado por las ideologías de sostienen los llamdos “expertos” y no de una visión objetiva de la realidad (si es que esto puede existir). Así que si existen diferentes maneras de entender la economía ¿con cuál nos quedamos?

Los documentales tienen la fuerza de contar aquellas historias que, por ser no ser de grandes personajes históricos, a veces nos pasan desapercibidos. En este caso, el pequeño héroe es un profesor tarraconense que es destinado a Bañuelos de la Bureba (Burgos) durante la II República Española. El profesor no es precisamente convencional. Usando un nuevo método educativo –la incorporación de la imprenta en las escuelas-, parece ganarse a los niños, pero no a las autoridades del pueblo. Con este historial, no es de extrañar que fuera uno de los primeros asesinados después del golpe militar del 36.

Pero este no es el típico documental sobre la memoria histórica. Que como tal, también funciona. Sino que el personaje tiene la fuerza de ramificarse por el futuro, sobre todo gracias a lo que logró influenciar a sus alumnos y a compañeros de profesión. Además, los revistillas elaboradas por los alumnos de los años 30, gracias a la aportación de la imprenta, nos transportan a la vida de un pueblo rural de principios de siglo. Y a pesar de la distancia temporal, nos damos cuenta que las motivaciones y problemáticas de los niños continúan siendo prácticamente las mismas: la necesidad de tener voz y ser escuchados.

Recomendable documental para aquellos que les apasione las historias pequeñas, y especialmente, para profesores y docentes.

Interesante documental sobre la escritora catalana Caterina Albert, que se escondió bajo el seudónimo de Víctor Català. Bajo el pretexto de ponerse en la piel de la escritora, una de las más influyentes de la literatura modernista, Míriam Iscla entrevista a estudiosas de su literatura. De manera cronológica así, vamos conociendo como se convirtió en escritora y como se relacionaba con su mundo y contexto, un lugar dominado por hombres. De este modo, descubrimos no solo sus principales obras, sino el entorno donde se producía.

La propuesta es sencilla, pero efectiva y se nota que está hecha con cariño. La única objeción, para mí, que puede darse es la elección de la actriz. No es que Míriam Iscla no se entregue y proponga una fugaz pero interesante interpretación, pero le quita credibilidad el desuso del dialecto propio de la escritora ampurdanesa, de la cual impregnó su obra. Eso hubiese sido un punto de calidad. Sin embargo, esto queda en un segundo término ante un necesario documental sobre una escritora que reivindicó, quizás sin quererlo, que las mujeres podían escribir y hacerlo de una manera que los hombres creían reservado para ellos. De este modo, se convierte en un referente. Vamos, necesaria.

En ocasiones hilarante, y en ocasiones, tierna. Con el pretexto -o hilo conductor- de indagar en la memoria colectiva, gracias al bandolero mítico Sanchicorrota, se nos descubre la zona de las Bardenas (Navarra). De la mano de sus propios habitantes, alguno de ellos bastante pintorescos, nos iremos adentrando en esta zona inhóspita que, poco a poco, se nos hará más hospitalaria. La búsqueda del personaje histórico irá perdiendo fuerza a favor de las historias entremezcladas en este territorio rural. Sus problemáticas, su visión del mundo y sobre todo, su idiosincrasia acaban siendo focos que enriquecen el documental y demuestran el variado, y a veces olvidado, paisaje humano que existe en la Península.

Totalmente absorbente, te dejará ganas de más. Historias sencillas, pero potentes y un paraje que funciona como un personaje más. Te dejará ganas de visitar las Bardenas, y sobre todo, a su gente.