Los euros que me gasté en la película hubieran estado mejor invertidos si me los hubiera tragado en monedas de un céntimo. Me engañó el trailer, parecía una oportunidad para ver actorazos del momento luciéndose y una historia de ciencia ficción en un universo calcado al nuestro pero revisitado y alternativo.

Una cinta que tiene que basarse en una historia fantástica y en efectos especiales se lía con un guión sencillo y subtramas con cero interés resultando previsible, aburrida y sobrecargada de CGI colorista 100% artificial. Los escenarios son todo croma y el vestuario de cartón piedra.

No la recomiendo ni me atrevo a volver a verla.

Fui a ver la película por haber visto el tráiler una semana antes y estaba predispuesto a tener una experiencia tensa y cerca al terror.

Con esta premisa me enfrento a una consecución de escenas y secuencias que me tienen la cabeza loca y haciéndome mil preguntas. Lo único que entiendo es que ella es "la casa" y él o es alguien real. A partir de ahí intento centrarme en tener una experiencia intensa a la espera del terror psicologico pero en varias ocasiones me quiero levantar y abandonad la sala, ya me da igual no llegar a ver la casa arder, que es lo único que tengo seguro del guión.

Después de ver la película mi sensación es extraña, acepto que no la he pillado y que la película tiene puntos muy fuertes. En cuanto llego a casa consulto el guión y críticas para saber que no he entendido.

Si puedes evadir los pensamientos y centrarte en la película la experiencia tiene puntos muy intensos y agobiantes, sin embargo el desarrollo lentisimo de la primera parte es tedioso y lleno de ejercicios de pretenciosidad que se quedan en nada. Yo no pude evadirme ni disfrutar el filme, pero reconozco que me he pasado más tiempo leyendo criricas y análisis porque es una cinta atípica e interesante, pero muy lejos de una película de 10.

La puntuo a razón de lo turbulento que me sentí durante el visionado y lo entretenido del análisis posterior. La vi hace dos días con mi pareja y todavía discutimos sobre madre!, que eso tiene algo de mérito.

A esta película no puede uno acercarse virgen, casi todos los amantes del género vieron la primera con fatales resultados, y las críticas de la presente invitan a verla con fruición pues el público está entusiasmado. Pero en qué mala hora.

Es innegable que es atrevida, divertida, alocada, colorista, efectista... es casi demasiadas cosas. Se enreda en explicar razones de los personajes y ralentiza el ritmo, esto lo intenta suplir con humor y gore, pero en un abanico tan abierto resulta demasiado inconexo. Respeto que los creadores hayan optado por ello, pero que no me vengan a decir que es una buena película y un logro de la industria, ni DC sacando pecho ni leches.

No le reconozco ningún mérito, el personaje del Tiburón está bien encontrado y se le saca partido, pero para las más de 2 horas que dura no merece la pena. No entiendo tanto entusiasmo con la película ni tanta crítica positiva.

No es una cinta para niños, tampoco para adultos... su público es una mezcla de jovenzuelos canallas y no tan jovenzuelos que adoran el frikismo con origen en los cómics y se dejan engatusar por historias con aspiraciones, personajes tontorrones, santurrones, y el humor blanco y absurdo.

Disfrutar del cine confiando en el criterio de los críticas de filmaffinity se hace imposible tratándose de cine español. Esta película tiene una valoración de 7 y las críticas están clarísimamente infladas a su favor.

No se puede negar que la película tiene una belleza estética y unos planos con mucha fuerza y comunicación, la música sorprende pero entra con calzador. La historia y los personajes (3 principales más la niña) se van desinflando y resultando desconocidos, histriónicos, histéricos, y la interpretación no los salva ni en la mitad de las escenas.

La gestión del misterio roza límites de ridículo y absurdo, resultando que al finalizar la película tienes que imaginarte muchas "horas" de guión que no hubiera resultado tan difícil hacer entender. Se me antoja un ejercicio caprichoso de hacer creer al espectador inteligente permitiendo que cada uno "se monte su película". Por ello, una película que intenta abordar los demonios que esconde lo humano, que representa los intentos por alcanzar lo divino, se queda en nada cuando la interpretación es totalmente libre y abierta.

Un ejercicio de asomarse a las página 10 a 30 de un diario preadolescente.

La película tiene varios méritos, como por ejemplo pasarse 100 minutos sin trama y sin que pase nada reseñable, también que estás anticipando por donde puede ir, dejando desaprovechadas todas las opciones dramáticas que abre.

Bromas y furia aparte, las actuaciones de las niñas tienen mérito y la ambientación de los años 90 está bien conseguida con vestuario y localizaciones.

Tan pretenciosa que no se entiende que pretende.

Lo mejor de la película es la canción de los créditos finales.