Versión chilena de aquel clásico de la comedia gringa que es Matrimonio con hijos, es una comedia muy agradable y a ratos hilarante, con buenos actores y con personajes en el punto justo de caricaturización. Como era de esperarse, los guiones y los personajes están muy apegados a la serie original pero esta versión se las arregla para “chilenizar” bien las historias y también darle identidad propia a los personajes, con un Tito Larrain tan perdedor como Ed Bundy, aunque las historias lo tratan con mucho menos crueldad, y una Quena (Peggy) menos sexopata y donde lo que prima es la flojera, y dos hijos tontos y chistosos, completando el grupo dos vecinos metiches pero muy distinto a los originales.

Entretenida serie sobre una guerra humano-alienígena, la cual carece de ese aspecto tan limpio de las series de ciencia-ficción de la misma época –como la nueva generación de Star Trek-, para presentarnos un futuro en guerra contra una raza alienígena y robots con forma humana –los silicons, si mal no recuerdo su nombre- que se han rebelado contra sus creadores y suelen tomar decisiones de vida y muerte –sobre la vida y la muerte de seres humanos- en base a lanzar una moneda al aire y si resulta cara o sello. Se centra en las andanzas de un variado grupo de marines espaciales involucrados en una guerra contra un humano muy superior mientras lidian con sus propios dramas y problemas personales. Duró solo una temporada pero perfectamente se le puede considerar un antecesor de series de ciencia ficción más “sucia” y realista como Battlestar Galáctica.

La popularidad de la serie The Nanny en Chile llevo, años después de terminada la serie, a realizar su propia versión, y fue todo un éxito, “chilenizando” y adaptando las historias de esta niñera a una realidad distinta pero conservando la gracia y los buenos chistes. Entre los cambios esta el que la niñera ya no es judía, eso debido a que la comunidad judía en Chile es muy pequeña y a diferencia del público gringo, el chileno no está familiarizado con la cultura judía y por lo tanto muchos chistes al respecto no son entendibles. También el hecho de que la niñera se llama Eliana y por eso le apodan “la Nany”, es porque en chile a las empleadas domesticas –que suelen cuidar a los hijos de sus patrones- se les llama “nanas” o “nanis”, es una forma de dejar en claro que la protagonista no es una empleada domestica sino una niñera, una categoría totalmente distinta.

Otros cambios tienen que ver con el conservadurismo del canal que transmitió esta serie y con el conservadurismo de la sociedad chilena en general, como el capitulo en que la Nanny se siente celosa de una mujer con la que trabaja su jefe, pero cuando la enfrenta esta mujer dice que no está interesada en la más mínimo en su jefe… porque es lesbiana.

¿Es para tanto la ferocidad de las críticas que ha recibido este film?, un poco, si. Incluso si la vemos de modo independiente sin tomar en cuenta la -estupenda- serie original, es una mala película.

Mortalmente seria, mortalmente aburrida, no hay mejores palabras –ni peores- para definir esta película, quizás la peor que el ha hecho.

Uno de los principales problemas es que Shyamalan no es el director adecuado para tratar este material, y viceversa, Airbender no es una serie que vaya con su estilo, el cual es reposado, calmo, intimista, etc., para una película como esta es necesario un director con mayor sentido del ritmo, de la aventura, alguien como Guillermo del Toro, no alguien más cómodo con el drama y el suspenso que Shyamalan.

Malas actuaciones, en especial de los protagonistas, y el que sean niños o adolescentes no es excusa, precisamente por eso necesitan ser guiados y aconsejados con mayor atención por parte del director, labor que Shyamalan al parecer no se molesto en cumplir.

Un montaje tan episódico como confuso, cambios absurdos al material original*, así como cambiar la pronunciación de los nombres, para hacerlos mas “asiáticamente correctos” (algo que tendría sentido si, ya saben, hubieran mas asiáticos en el elenco). Luego están las peleas, sin emoción alguna, ridículas si uno las mira con atención y que desaprovechan por completo la espectacularidad que hubieran tenido de saber usar bien el control sobre los elementos.

Y todo eso sin hablar de la polémica racial, aunque, como dicen ciertos testimonios en Internet, el controvertido casting podría ser imposición de los ejecutivos del estudio.

También esta el asunto de los espíritus, la espiritualidad y todo eso, esos temas ya estaban presentes en la serie animada, pero de un modo tan sutil que no parecía que uno estuviera viendo el Tercer Ojo de Lobsang Rampa para niños, en la película en cambio es un elemento mal integrado y que no sirve de nada a la hora de dar algo de profundidad o trascendencia a la trama.

En fin, una mediocridad absoluta, pero los críticos, profesionales o no, no habrían sido tan duros de no ser que Shyamalan ya había decepcionado a muchos con sus películas anteriores, al menos desde La Joven del agua, y algunos ya desde Señales. Un producto mediocre como este simplemente colmó la paciencia de muchos, incluso de algunos de sus fans más acérrimos.

¿Algo bueno?, pues si:

-La música, aunque no sea responsabilidad directa del director.

-La estética en general de la película.

-Algunas escenas en particular.

-La idea de cómo identificar al Avatar mediante los elementos.

-Algunos efectos especiales, como el fuego y el agua, en general.

Ya para los 90`s Popeye era un personaje demasiado antiguo como para atraer al publico infantil de esa década, de modo que había que modernizarlo y cambiar el protagonismo a alguien mas joven, con quien los… jóvenes (precisamente) pudieran sentirse identificados. Y así surgieron las aventuras de Popeye e hijo, y también Bruto e hijo, y no esta mal. Tienen historias entretenidas, como la del monstruo o el velloncillo de oro (“¡Uffff! ¡Ahora recuerdo porque no quise llevármelo!”), no hay forzadas moralejas y además al hijo de Popeye no le gustan las espinacas, algo con que todos, sin importar su edad, pueden sentirse identificados.

Lastima que solo duro 13 episodios, probablemente a los niños no les llamo la atencion por ser Popeye un personaje demasiado antiguo.