Todo un clásico en tierras anglosajonas y también en España en el momento de su estreno. Pero como suele suceder en nuestro país gracias a la telebasura y no reemisión de clásicos se olvida todo lo bueno.
Primera y única entrega recomendable de la trilogía de Barbara Taylor Bradford que se rodó por auténticos artesanos de la TV Inglesa para el Channel 4 y que recuperó a la grandiosa Deborah Kerr que ya llevaba unos años alejada de su retiro haciendo cosillas para cine y TV. Su trabajo fue recompensado con una nominación al Emmy.
En pocas palabras, la historia de una chica humilde que llegará a convertirse en una de las mujeres más ricas de Inglaterra con el consiguiente reguero de amores y traiciones a lo largo de su vida. EL típico folletín que en otras manos hubiera sido una serie mala aquí se convirtió en una maravillosa miniserie.
No solo nos trajo de vuelta a Deborah Kerr sino que aparte de tener a grandes nombres de la escena inglesa le dió su primera oportunidad a Liam Neeson y a Jenny Seagrove en papeles con peso.
La serie se encuentra editada en DVD pero con un doblaje nuevo que no sé como estará, yo conservo aún el original de TVE.
Excelente la imagen final y el mensaje en boca de Emma Harte

La vi de niño y me encantó. Me reí de lo loca que era y cada x años vuelvo a verla y sigo riendo a carcajadas. El doblaje español es excelente así que disfruto el doble viéndola a veces doblada y otras en VO.
Poco hay que decir. Una screwball comedy en toda regla que bebe de los clásicos (La fiera de mi niña) y con ese look de los 70 gana puntos.
Obra maestra

Visualmente la película es una delicia de principio a fin con esos campos inmensos.
Las actuaciones y la dirección de la película igualmente es muy buena. El trio protagonista hace muy bien su trabajo. Y John Mills sencillamente adorable como siempre.
La mayoría de las críticas negativas de esta película se debe a que el director no acaba de mojarse en todo el metraje y no opta por definir la película..¿es un drama, comedia, western?
Yo disfruté viéndola y es cierto que tiene momentos muy buenos de comedia para lanzar una gran carcajada pero el director no da ese paso. Y quizá ese sea su pequeño (o gran) fallo porque la película es elegante a radiar, tiene fuerza...pero le falta ese empujón para que perdure.
¿Merece la pena? Sí. ¿Pasaré un buen rato? Casi seguro que sí. ¿Volveré a verla? Puede, si la pillo un día en la TV y no hay nada más; pero no estará en mis prioridades por ese pequeño (gran) fallo

Me encanta la buena TV y tuve la suerte de ver muchas series de la edad dorada de la TV americana y británica emitidas en España y años después gracias al dominio del idioma poder disfrutar aquellas que nunca se emitieron o que por mi edad no pude ver.
Remington Steele junto con Luz de Luna fueron las dos series de la época que trataban el tema de la pareja de detectives y la tensión sexual entre ambos protagonistas. Mientras Luz de Luna empezó muy bien y a partir de cierta temporada se echó a perder, Remington Steele consiguió mantenerse en todas sus temporadas como un producto excelente.
Por supuesto como toda serie, la primera temporada es quizá la más floja ya que la serie estaba buscando su forma de ser y aunque quedó bastante marcada ya en esta temporada lo que la serie iba a ser, es a partir de la segunda cuando ya sube como la espuma y de ahí no bajará.
Cómo han dicho muchos aquí la química de la pareja protagonista y el humor de la serie es una maravilla.
La serie ha envejecido muy bien y se ve con muchísimo cariño.
En relación con otros productos de la época que siempre se repetían mucho, está serie mostraba esa continuidad de la relación entre los personajes que no se consumaba.

Una de esas películas con un gran reparto y que sin embargo casi nadie conoce.
Una buena película para pasar un rato agradable y a la que se le echa en falta tan solo esa chispa en la comedia.
Para que nos entendamos...los actores están geniales, el guión es bueno pero como decía Billy Wilder no consigo la carcajada...quizá como él hacía al rodar, necesitaba rodar con un cronómetro y decía: perfecto...ahora vamos a repetir la toma pero que dure 20 segundos menos. Era su técnica de lograr el gag perfecto para la carcajada