Que te ríes mucho, vamos. En pocas pelis del maldito Sr, Presidente podemos ver a la primera dama berreando mientras queda suspendida por una cuerda de un avión.. en pleno vuelo.
Y que un misil entra en otro avión? Nada, hombre, nos lo cargamos al hombro unos cuantos pasajeros a la orden azafatil de "hay que sacarlo de aquí!!", y poco responsablemente lo tiramos por un agujero.. Brutal escena de espamo nervioso.

Me ha gustado bastante. Y es atrevida viniendo de donde viene.
Pero no es un descubrimiento que los israelíes se enamoran, les gusta el sexo como a todo hijo de vecino, que los hay gays, sensibles, machitos, que las bombas también les hacen pupa. Tiene cierta estética de festival de cine gay. Por momentos parece un video clip de música pop israelí o tecno, y otras tiene una carga erótica que, unida a tantos chicos guapos en uniforme, podría pasar por porno del suavecito.

Pues sí, es lo que le pasa a la protagonista de este film, y aquí tenemos esta cruda película para hacernos voyeurs por unos minutos. No creo que sea necesario tener un estómago especial para poder verla; no hay nada que no aparezca mucho más en otras películas, es decir, violencia. Y por poco que se haya investigado más allá de la postura del misionero, la curiosidad del espectador se verá estimulada, en un intento de comprender cómo piensa un aficionado al sadomasoquismo, alguien que en un grado que varía mucho de unos a otros, disfruta con cierto grado de violencia y/o dominación en sus relaciones sexuales. La interpretación de Huppert es magistral, toda la película está hecha con sumo gusto.