Resulta una película difícil de etiquetar. Probablemente sea imposible. Creo que esa puede ser su mejor virtud. 'Interstellar' ofrece una apasionante (y algo enrevesada) reflexión sobre el futuro de una humanidad que se ve abocada a buscar un nuevo hogar tras el colapso de la Tierra. Momentos de cine brillantes dan paso a otros en los que el espectador no puede sino pensar que la cinta se hace larga. Creo que es una película totalmente ambigua. No solo en su trama, que ofrece momentos de esperanza y de desolación a partes iguales (se reflejan los sentimientos de valentía, amor y solidaridad, pero también el egoísmo, el miedo o la mentira) sino también como obra en sí. Determinados elementos de reflexión, absolutamente creíbles y con capacidad de generar una empatía excepcional con los personajes, se mezclan con otros algo difíciles de digerir. En todo caso, y pese a su duración, será uno de los films del año. McConaughey nos está acostumbrando a un rendimiento fuera de lo común. Tras 'Dallas Buyers Club' y su paso por la primera temporada de 'True Detective', completa un triplete de oro. También a un alto nivel Anne Hathaway.

'Dallas Buyers Club' es una de esas historias humanas que siempre merece la pena ser contadas, y escuchadas. Comienzos de los años 90', el SIDA se extiende a una velocidad de vértigo, y aún no existen tratamientos efectivos contra él. En este contexto, un cowboy, mujeriego, homófobo y bebedor contrae la enfermedad. Con todo lo que ello supone. Comienza un duro camino para lidiar con ella y con el estigma social que entonces implicaba. El cambio personal que experimenta, principal aliciente de la película. Interpretación soberbia de McConaughey, que le permitió conquistar el premio Óscar. Le acompaña un soberbio Jared Leto en el papel de un joven homosexual marcado por la enfermedad, y que se alzó con la estatuilla a mejor secundario. Sin duda ambas merecidas.

Para los amantes de la saga Bond, como un servidor, Skyfall resulta imprescindible. Una delicia al paladar. La combinación de elementos del Bond clásico, tradicional y sofisticado, con otros ciertamente más modernos, ofrece un cocktail (removido pero no agitado) de gran calidad.

La película ofrece una mirada diferente de la capital inglesa, más gris de lo habitual, y amenazada por unos nuevos movimientos terroristas que se apoyan en esa red infranqueable que supone internet.

Con mucha más extensión de lo habitual en las películas de una saga generalmente limitada a la acción sin profundidad, el film arroja muchos y variados elementos de reflexión (el paso del tiempo en los agentes; la lealtad en un mundo como el espionaje; la vulnerabilidad informática de los países; la ausencia de fronteras en un mundo globalizado...). Mendes consigue encajar a la perfección las piezas de la violencia refinada del agente 007 con estos elementos. Probablemente la saga ha encontrado a su mejor director. Repetirá en la próxima, por cierto. Buenas noticias para los seguidores.

Casino Royale ya fue un auténtico triunfo. La revolución que trajo consigo Craig (un Bond ligeramente más rudo de lo acostumbrado) logró un éxito a mi juicio inesperado. La precipitación por su reválida llevó a 'Quantum of Solace', ese insoportable trabajo que ni sus autores son capaces de defender. Para 'Skyfall' las cosas volvieron a hacerse bien. Se midieron correctamente los tiempos, se pudo construir un guión que atrajo por fin a Bardem (un villano para recordar; probablemente en el top 3 de los mejores), y se introdujeron piezas que generan una película redonda. La cantidad de guiños hacia las primeras obras de la saga despiertan una sonrisa en los fans del agente inglés.

De nuevo inconmesurable Judi Dench (siempre insistiré en que estamos ante una de las mejores actrices de todos los tiempos), a la que se une en su burocrático papel el ya consagrado Ralph Fiennes.

Seré contundente. Junto con 'Goldfinger' y 'Desde Rusia con Amor', la mejor película de la saga.

Podría describirse la película diciendo simplemente "Tarantino". Para lo bueno y para lo malo. Una acción desenfrenada que sabe transmitir el crisol de emociones característico de las tramas sobre la esclavitud en la EEUU de comienzos de siglo. Esto es lo bueno. Lo malo, lo habitual. Un reguero de violencia, en ocasiones injustificada, que consigue lo peor que una película dramática puede lograr: hacerte reír en momentos en que (teóricamente) no lo pretende. Waltz y DiCaprio, a un alto nivel.

La desmesura que arroja la cinta desde su fase intermedia hasta el final tal vez esté un poco pasada de rosca. Aunque no resultará extraño al seguidor del director tras sus últimas obras. Muy buen trabajo con el vestuario, e incluso me atrevería a decir que con la banda sonora. Esta última logra aportar destellos de humor (pretendidos esta vez) que aligeran bastante un menú en el que la sangre brota sin igual.

Muy interesante film, que nos transporta a un futuro cercano y marcado por la importancia crucial de las tecnologías en el día a día. Reflexión profunda (y magistralmente interpretada por Joaquin Phoenix) acerca del amor y la amistad, reflejada en las vicisitudes de una inteligencia artificial cuyos límites son difíciles de augurar.