¿Dónde está la trama...? ¿Dónde está la trama...? Cucu... ¿trama?¿
Pues eso: historia de amor entre vampirorro guaperas y adolescente inconformista (uuuh, que malota), sin impedimentos que solventar, sin dudas que disipar, sin terceras personas con que lidiar... pues vaya. A mi perro le gusta mi perra, y no por ello haré una película.

La prota: chica seca, seca y reseca que habla como una persona de 70 años que acaba de reencontrarse con su DNI y no le gusta lo que ve, pero que trae de cabeza a todos sus hormonalmente influenciados amigos varones (por su personalidad, claro).
Él: vampirorro guaperas encantadoramente enigmático, encantadoramente solitario y encantadoramente introvertido (versión en feo = enfermo antisociable).
Y luego, lo típico: que si yo te busco, que si tú me buscas, ahora nos encontramos, ahora no, que si yo te huelo... lo dicho: muy canino todo. Creo que hay un vampiro malvado por ahí y todo, pero no me hagais mucho caso...

Por último, lo que más me jode: el vampiro, ese gran desconocido para la señorita Meyer: se olisquean, se gruñen, beben de vaca (y puede que en vaso) y lo peor de todo ... (en spoiler). Vamos, que sólo les falta lavarse la cara con agua bendita. Si Bram Stoker estuviera aquí...

En resumen: quien quiera ver un drama romántico, le defraudará no ver drama; quien quiera ver vampiros, le defraudará ver vampiros-chucho, y quien quiera parecer sensible para meterle mano a la novia de turno luego salivándose las mejillas mientras la ve, mu bien.

El cinco va por lo que me rei luego comentándola.

...y les falto un pelo. En absoluto execrable secuela de su genial antecesora, que da un giro a la trama lleno de frescura e incluso simpatía. Y ahora al grano:
Rec 2 ofrece aquello lo que en lo que falló en Rec 1:
Para empezar, la historia. Rec 2 retuerce la realidad del virus salido de la nada que ponía sobre la mesa Rec 1 con una nueva y desconcertante teoría sobre la niña Madeiros, que de hecho quedaba atisbada en la primera parte, pero de la que se dudaba al finalizar ésta. Me parece un cambio impactante, osado (estaba claro que mucha gente podría llegar a sentirse cabreada e incluso "traicionada") y, aún así, potable.
La secuencia de muertes es mucho más aleatoria e indiscriminada y, por consiguiente, la incertidumbre sobre "quién será el siguiente" queda satisfecha (en general, en la primera estaba claro quienes no y sí iban a morir y cuando). Esto es sobre todo por el juego de cámaras, que hacen posible que nuestra visión pueda seguir viva sucediendo casi cualquier cosa.

Por otro lado, fallan elementos en los que su antecesora obtuvo matrícula: la frescura de diálogos, de actitud de los personajes y de reacciones es mucho peor. Casi parece que los actores lo hacen mejor cuando se representan a sí mismos y no a soldados superentrenados. Creo que aún no se ha logrado encontrar el equilibrio entre historia, dinámica y realismo, lo cual me parecería la perfección. Según mi opinión claro.

En cuanto a los "sustos"... bueno, cadas cual a su gusto. Creo que la primera sorprendía más (quizás por nueva). Los de la segunda son más forzados y desacompasados (aunque alguno que otro si que consigue tensionarte en el asiento como consiguió la primera tantas veces), tal y como pasaba en "Quarantine" que (a parte de ser una calcamonia), fallaba en ese aspecto. Eso y el hecho de meter soldados (que como idea para el juego de cámaras me sigue pareciendo genial) me hacen pensar que quizás se haya inspirado un poco de más en la versión americana, despegándose de la española, que al final a resultado estar un poquito por encima (y mucho más que la americana).

Conclusión: merece la pena verla, sin pretensiones y con la mente bastante abierta.

Pdt: Si hay tercera, podría convertirse en la mejor película de terror española de la historia (y quien sabe), o en la peor película en general de la historia. Recemos.

Eminentemente espeluznante y notablemente entretenida me ha parecido está película. Y es que el mérito lo tiene, sobre todo, por superar las adversidades propuestas por un guionista que, o bien esperó al último momento para ponerse manos a la obra, o bien le pidió que le hiciera su trabajo a su hijo pequeño, al hermano tonto de la familia, a su perro o a alguna especie de tubérculo hogareño, porque si no no me explico como demonios se consigue tamaña mierda de conversaciones.
Guiones a parte, el argumento no es sólido, pero como tampoco se le da mucha importancia pasa desapercivido; el desarrollo es dinámico (por no repetir "entretenido") y el final es (subjetivamente hablando) la ostia.
Desde luego, a la peli no le falta nada. Pero claro, le sobra...