Intemperie es la inmersión de Benito Zambrano en el western. Ambientado en los años 40, esta historia de pocos personajes goza de una excelente atmósfera donde vemos la aridez, pobreza y destrucción de la postguerra española.
La búsqueda descarnada del capataz de un pueblo hacia un niño que escapa despavorido en el desierto de Almería, es el eje de la trama principal. Este niño encontrará un oasis en un pastor interpretado por Luis Tosar que le ofrecerá cobijo y protección ante tan desesperante situación.
En el reparto sobresalen Callejo y sobre todo, Tosar volviendo a bordar el personaje mejor construido del reparto.
El desarrollo de la trama principal se realiza de manera solvente y fluida y es quizás la baza más fuerte de esta película en la que se hecha en falta algo más de empaque y originalidad.

Ma Ma fue presentada como la historia de Magda, una mujer con cáncer que ante los momentos más trágicos de su vida se crece ante la adversidad, sacando lo mejor de sí.
El resultado es tan sugerente como irregular. Presentar un drama desde el lado más optimista, ayuda a digerir una historia tan dura como esta. Pero en este caso llega a darle un tono artificioso y algo incomprensible. Prueba de ello son las reacciones de Magda ante sus diagnósticos, en principio enternecen pero se vuelven demasiado redundantes. Capítulo aparte, merecen la surrealista complicidad con su doctor (sus cancioncitas en quirófano, rozan el patetismo…) y la constante presencia de una niña siberiana con la que no termino de conectar...
Pero pese a dichos artificios no puedo evitar verme lastrado por esta historia de pocos personajes unidos por el dolor y la tragedia y que conforme avanza la película van iluminándose con la luz de una Magda que termina dando un auténtico canto a la vida.
Medem impregna con su estilo cada escena de la película cuidando mucho cada detalle, como muestra su gélida fotografía o la omnipresente banda sonora. Descuida no obstante, el guión dejando que los actores lo saquen a flote, dotándolo de verdad y sentimentalismo.
Mientras el siempre solvente Tosar se encuentra con el pesonaje más serio y contenido tanto de de su carrera, como de la película, a Asier le cuesta defenderse como puede con el personaje más extravagante de la historia. En cuanto a Penélope Cruz aunque al principio también se vea afectada por torpezas del guion, conforme va avanzando el film se mete de lleno en la piel de Magda contagiándonos su dolor, sus sentimientos y sobre todo su amor a la vida.

Manual de amore 2 narra las distintas formas de entender y vivir el amor. A través de cuatro historias enlazadas de una forma bastante tosca y desafortunada, la película narra el amor entendido dentro de la infidelidad con unas bellísimas y sensuales Mónica Beluchi y Elsa Pataky, quiénes sin aportar grandes dotes interpretativas, protagonizan las dos historias más interesantes del film. A este conjunto de historias se suman la de una pareja en crisis, bastante histriónica y cargante, y con el único deseo de ser padres y la de una pareja de homosexuales que más que representar a este colectivo, parecen insultarlo de una forma caricaturesca, surrealista y sin gracia, éstos con el deseo casarse. Y para solucionar sus problemas acuden a ese paraíso fiscal que según este film es España ¿curioso no? Véanla y juzguen ustedes.

El tigre y la nieve aborda una interesante historia de amor entre dos personajes, que estando bien situados profesionalmente, se ven afectados por una guerra de candente actualidad en Bagdad.
Con su habitual tono de comedia Roberto Benigni, vuelve a mostrar la crueldad de la sociedad desde la sonrisa, desde una mirada inocente y con gran sentido del humor.
El problema de esta película es la inevitable comparación con su gran obra maestra: La vida es bella. Las situaciones, los personajes… todo parece calcado. Podríamos considerarla una continuación de aquella. Simplemente en esta película se perdió ese factor sorpresa que cautivó a medio mundo con la vida es bella. Las situaciones nos las esperamos, los personajes ya los conocíamos y el desarrollo de la película se vuelve previsible. Y a esto se le suma un guión que no está a la altura del anterior con incorrecciones a la hora de abordar la trama seria de la guerra (faltó algo de responsabilidad en este tratamiento y un poco más de sensibilidad).
Aún así esta película no aburre, sus situaciones son de nuevo magníficas (la improvisada cena en el piso, el carro saqueado…), los detalles cómicos están muy cuidados y Benigni crea un clima que enternece al espectador más frío. El final muy lírico, nos sirve para saber que después de todo ir al cine ha valido la pena.

Alatriste la película más cara de la historia, ha sido en mi opinión la gran decepción del cine español de este año. Unas buenas críticas por parte de casi toda la prensa española, así como un excelente resultado en taquilla, contrastan con las críticas leídas aquí en filmaffinity. Es difícil añadir algo que no se haya dicho ya. Coincido con los que opinan que la película se hace demasiado lenta, algo en el guión falla, faltan más diálogos, más realismo en una historia demasiado lírica. No obstante, confieso que el cine de aventuras nunca fue mi preferido y en base a esto en el metraje se me hicieron muy pesadas la sucesión de batallas, algunas demasiado parecidas. Los personajes tienen todos vida propia y todos una cara conocida. Los mejores actores de nuestro cine español desfilan con diferente fortuna:
Vigo, esta muy bien en su personaje. Me chocó mucho su frialdad, su voz susurrante… pero a medida que avanza el film se come la pantalla.
De los demás destaco a Ariadna Gil, sus escenas son apasionantes y se come la pantalla en cada escena en que sale. La escena del encuentro final fue para mí lo mejor de Alatriste. Ariadna transmite la fragilidad y el sentimiento que requiere su persona de forma sobresaliente. Esta actriz que en este año lleva ya tres películas de éxito estrenadas, creo que merece una nueva nominación al Goya por este papel.
Por su parte la sensualidad de la malvada Elena Anaya, así como la frescura Ugalde ponen de manifiesto que estos actores son algo más que caras bonitas. A Pilar López de Ayala le faltó un personaje más amplio.
Sin embargo no logró convencerme Eduardo Noriega (le falta intensidad, credibilidad y no está a la altura de Vigo), tampoco convence la gran Blanca Portillo (como obispo o cura era difícil verla), Javier Cámara demasiado cómico en mi opinión y Echanove: nunca imaginé a Quevedo así. Alguien decía que unos personajes anónimos hubiesen sido más creíbles, quizás sea este el fallo. Hay que destacar que cada personaje tiene vida propia, unas líneas muy cuidadas y es difícil destacar protagonismos a excepción de Vigo.
Como conclusión, destacar que la película es más que correcta: fiel a la obra de Pérez Reverte, gran documentación y en el apartado técnico: fotografía estupenda, decorados muy bien elegidos, batallas bien recreadas, dentro de las posibilidades y vestuario y música que la pondrán en la mejor posición de cara a los Goya (los técnicos los merece). Aunque la fama de la película ha hecho a más de uno llevarse una decepción.
Vale la pena verla, aunque no es para tanto.