Debo decir que me esperaba algo mucho peor pero el guionista de Juno ha tratado de retratar la sociedad americana a modo de comedia dejando el terror a un lado, sin embargo al final cae en todos los tópicos y en el gran error de venderla como película de terror adolescente.


Lo mejor: La actriz de doblaje española que dice con una emocionada entonación "!Estoy muy sabrosona!". Con esto podríamos resumir el espíritu del filme.

Ya está, Disney ha fagocitado a Marvel. "Shang-Chi y la leyenda de los diez anillos" no se corta en saquear ciertas particularidades visuales de "Raya y el último dragón", pero sin su calidad narrativa y su hábil puesta en escena.

Es la primera película de Marvel que no se siente Marvelita. Aunque estamos ante la presentación de un personaje, parece que la empresa del ratón está sellando el ticket del parking. Se ha vuelto tan rutinario presentar a nuevos héroes que todo se corta por un mismo patrón, sin originalidad y vacío.

En cuanto a los efectos especiales el cgi de Maléfica o Avengers nos ha demostrado que se puede hacer un mundo fantástico con elementos creíbles, este no es el caso. El clan de los 10 anillos tiene una preocupante falta de adeptos, no dan respeto ni miedo y lo peor es que el grupo de héroes tampoco es que esté muy nutrido. El resto es un croma, la gran estrella del show.

Siento darle esta nota porque tenía esperanzas en ella, pero al salir del cine sientes que algo falla, algo que como no solucionen "Los Eternos" será la tónica de la fase 5: personajes planos en historias que no están a la altura de los cómics que les han dado vida.

Gélida como aliento de un Yeti
Si bien antes de empezar la crítica voy a descartar algunos argumentos que no me sirven para desestimar una crítica:

-1. Ya sabías que ibas a ver peleas, cazurro, ¿esperabas ver algo profundo?

-2. Soy el mayor fan de la saga, con lo cual perdí el criterio durante la misma.

Como gran fan de la saga cuando vi que resucitaba dándola ya por perdida me temí lo peor, pero esperaba esa mezcla de tensión sexual y brutalidad vampiro-licántropa que acompañaron a sus 2 predecesoras y a su precuela. En dicha precuela se nos contaba mediante un trasfondo de guerra una historia de amor y violencia, teñida de sangre y sexualidad homoerótica. Había toques de humor, había ciertos momentos de seducción, en definitiva, había alma en los anteriores proyectos.

Los orígenes de sus directores congelan cualquier atisbo de pasión, de rabia o cualquier manifestación que pueda ser considerada algo más que un tic involuntario. Tratan de traer a Selene de nuevo a la vida, pero solo se traen a Kate Beckinsale, que con cierto estilo intenta capear el más lineal de los guiones para su personaje fetiche. Lo más sorprendente es que las escasísimas ocasiones en que podemos comprobar que los personajes no se han quedado mudos ya se han aprovechado para introducirlas en los tráiler.

Los críticos han aplaudido que se dejara a un lado la mitología de la saga en un ejercicio del cinismo al que nos tienen acostumbrados sus viperinas lenguas tan afiladas como se les indique desde la edición. Saben que no pueden luchar contra la saga que está llamada a competir con Resident Evil en los próximos años.

Y es que Selene ha sufrido el mismo calvario que Alice, su alter ego, para sobrevivir en la pantalla ambas han tenido que abandonar cualquier minuto de metraje de sus películas que no esté justificado para el 3D. Selene es solo un vestigio, Michael es una sombra que se desvanece, los nuevos personajes apenas están perfilados y su presencia es únicamente justificada para reavivar el homoerotismo de antaño. Pero que va. Ni torsos musculosos y peludos, ni una sola escena de odio o amor. Encefalograma plano.

La maldición del frío también llega a ti como espectador, que te vas petrificando al ver como los personajes actúan sin motivación alguna, que lo mismo les da a sus directores ocho que ochenta. Por fin aflora la emotividad, el desgarro, la emoción, pero no es la película, eres tú en tus asiento, que lloras a tus mitos caídos. Como un bloque de hielo que se escarcha, el mundo de Underworld va desapareciendo, la acción no puede sostener un producto tan muerto, y cede sepultando cualquier indicio del pasado para presentarnos a una nueva Nikita, que actúa sin pretensiones, se queda con el espectador y que bien podía haberse quedado helada en su arcón, que despertar la saga para insultar al público que la encumbró.

Parece que el director se ha perdido un poco en la historia que es interesante, bien descrita y con los típicos desórdenes del fantástico director.

Soy admirador de Tarantino por ello he de decir que es de una película que podría haber pasado muy bien por ser de otro director. Le falta garra, le falta suspicacia, es inteligente pero una vez más parece que los cortes de la edición original le han quitado fuerza a la versión cinematográfica. Más de comercialidad y menos de genio artístico.

Si no hubiera vivido las primeras temporadas de Expediente X el nombre de Chris Carter pasaría sin pena ni gloria como director de un Thriller entretenido, sin demasiadas pretensiones y eso sí con una gran interpretación de Gillian Anderson. Sin embargo yo soy un fan más de Expediente X y aunque recibo con agrado nuevo material sobre la serie debo decir como crítico que en la cinta esta presente poco o nada de lo que me hizo admirador de la obra de Carter.

Sabiendo pues quién es cada cual como seguidor de la saga me parece un capitulo alargado de una serie "parecida" a la que vi allá por los 90, con una Dana Scully y un Fox Mullder diferentes y edulcorados. Es un montaje carente de pasión, con un enorme desinterés y desgana de cara a ser respetada cinematográficamente hablando. Si bien posee guión bastante aceptable en términos comerciales, la escenografía no ayuda en absoluto a engrandecer la película.

Es un caramelo con buen envoltorio, buen color interpretativo, y un sabor indefinido y bastante decepcionante para los adictos a estos dulces. Sin más metáforas, recuerda a alguna historia de la terrible y última 9ª temporada de la serie. Desde luego nos muestra una evolución de los personajes y una historia un tanto Gore mas propia de "Millenium" (siguiente e injustamente cancelada serie de Carter), pero que le da carisma al relato. Tiene además un buen ritmo narrativo y se deja ver con facilidad, pero sinceramente, esperaba algo más profundo, algo que recordase a todo el mundo que esta serie ensalzó el género de los fenómenos paranormales y de la ciencia-ficción.