Relato sobre las vivencias de un cazador (veterano de guerra) que se gana la vida entre ciervo y ciervo en el gélido norte de Maine.

Mundano film que no necesita de (d)efectos especiales para lograr captar el interés del espectador a menos que, claro, el espectador sea ávido deglutidor de ensaladas posmodernas.
Desde el vamos uno se percata de lo que va a visionar debido a su tráiler, a sus imágenes de promoción y a la sinopsis del filme, ergo, da lo que promete.
Berenger está mal aprovechado y si bien nunca fue un actor demasiado expresivo, el director pudo haber sacado un mayor rédito, a pesar de que para el fin del film no era necesario, por lo que está bien de todas formas.

Lo rústico de sus imágenes debido al gran acierto en las locaciones y a lo palpable de la estética realista con sus pausas entre pucho y pucho hacen que todo sea llevadero aunque, siendo justos, no alcanza para ponderarla con más nota de la dada.

Lo mejor: cero agenda femibolche de género, cero progremongolismo, cero sexo que nada explica, cero inclusión travestida, cero mierda metida a los empujones, simplemente un guion lineal y sin grandes pretensiones...

Lo peor: lo forzado de ciertos diálogos y situaciones en pos de su final, al cual se lo ve venir a kilómetros con tan solo mirar los primeros quince minutos de película.

Pocas narraciones son tan acertadas como las de Victor y Genevray, pocas direcciones son tan atinadas como la de Philippot y pocas actuaciones son tan vulnerablemente exquisitas como la de Suliane Brahim.

Al "terror" de este filme se lo puede calificar de, quizás, terror inteligente o terror psicológico pero así y todo, yo prefiero catalogarlo como 'drama familiar in crescendo'.
Su personal cuota de suspenso no es más que un marco para un guión que detalla con rigor artístico la evolución de sus personajes en tan solo cien minutos.
A destacar las actuaciones en general ya que todas logran mimetizarse entre sí, amalgamando gradualmente la premisa con el conjunto sin desoír los tiempos, esenciales en el argumento.

Como toda producción, tiene sus puntos flacos aunque los mismos no condicionan en absoluto el desarrollo de la trama, con escenas que aparentan relleno debido al manejo errado del propósito de algunas de las mismas.

Lo mejor: su ambientación gris a plena luz del sol y cómo esta muta para solapar en sedas un realismo que sugiere la decantación de la locura por peldaños, todo cubierto con un tinte profundamente cortazariano.

Lo peor: lo precoz de su resolución, como queriendo aglutinar sin solucionar en pos de cubrir los tiempos para quedar en los límites de un film aceptable en su extensión horaria.

Si bien critico ferozmente la necedad intrínseca del meta-cine progremongolesco actual y sus esfuerzos trans-humanos por meter mierda posfeminista en todos lados, reconozco el "ingenio" de estas producciones por intentar (no)repetirse entre todas y cómo le buscan el rulo al pelo lacio.

Mal armada, mal editada, con unos efectos deplorables que ni 'Jasón y los argonautas' en los 60's, sumado a unos giros de trama más que boludos y una densidad semántica titánicamente soporífera.
Gran mejunje de diálogos berretas aglutinados a los mamporros neuróticos en pos de una careta argumentativa.
Una grandiosa chotada al nivel de la última de 'Charly's Angels', con eso ya está todo dicho.

Momoa participa, espero yo, porque hay que pagar la renta y otra no le queda ya que, de lo contrario, es inentendible su aparición en esta mierda fílmica.
La chica zafó en su actuación pero así y todo no logra congraciarse debido al guión tremendamente paupérrimo.

Lo mejor: ver un rato a Momoa que me cae bien, aunque le recomendaría que deje de hacer este tipo de idioteces porque le pueden jugar en contra a largo plazo.

Lo peor: que este tipo de porquerías (no)pochocleras tienden a hacer mierda carreras antes de que las mismas empiecen como, por ejemplo, la de la niña Isabela Merced.

Empezamos con una referencia explícita y superficial a 'La Ventana Indiscreta' de Hitchcock, pero sin ser más que eso, ergo, no esperemos estructura fantástica aplicado al cine ni de lejos.

A esta cinta la sostiene únicamente la actuación de Amy Adams, dejando siempre un eximio trabajo, digno de una actriz de su calibre.
Estaba Oldman también, aunque pésimamente dirigido o, quizás, no tenía ganas de estar ahí pero al mismo tiempo hay que pagar las cuentas entonces se sumó y listo.
A destacar la aparición de Julianne Moore, más allá de las claras limitaciones de tiempo en pantalla.

Interesante fue también, aunque no (des)agendado, el desarrollo agorafóbico (y en consecuencia depresivo) de la Dra. Anna Fox pero, fuera de eso, la trama es totalmente difusa, empatizando ésta con dicho personaje.

Lo mejor: la ambientación con ese estilo pseudo-neo-noir de aires surrealistas que tanto llama la atención, aún cuando no termine de cerrar del todo a causa del guión pero bueno, el intento estuvo y eso se respeta.

Lo peor: el final, total y absolutamente paupérrimo y descontextualizado de todo; es increíble cómo tan terrible paparruchada puede pasar un solo filtro, sinceramente inentendible.

Previo a la "crítica", se agradece que todavía exista un foro como este con el respeto irrestricto hacia la opinión del usuario, y además enfatizo la libertad de expresión, nula en prácticamente cualquier red social.

Con respecto al film en cuestión, nada del otro mundo.
Tópicos de a toneladas que se mueven entre lo que parece una fusión entre Piratas del Caribe con Indiana Jones, siendo similares no solo sus tramas en líneas generales sino, inclusive, el villano en particular con la de Harrison Ford: el típico alemán "nazi" que los persigue sin cansancio en pos de apoderarse del tesoro.

Y ese Disney que amaga y engaña con volver a ser el de antes pero que, cual Netflix al cubo, te tira cien bombas "sjwprogrewoke" de humo y, en el medio, otra más pero esta vez solo de humo.

Lo mejor: el odio que este film le generó al colectivo lgtbquiqwertyfuckthereality+++ por no haber metido a ningún fantasma travestido con el pelo teñido de fucsia fue monumental, para enmarcar.

Lo peor: los de Disney deschavándose solos y aceptando su condición de progre-snowflakes con el nombre dado al cáliz del poder buscado por los personajes, llamado 'La Flor de las Lágrimas de Cristal'.