La cinta tiene interés por cuanto, para empezar, tiene intriga, hasta el final no se sabe a ciencia cierta si la protagonista es una farsante o una verdadera médium. Su resolución está bien, no defrauda, pero para ello hay que pasar por bastante minutos ciertamente irregulares.
El comienzo, más o menos su primera media hora es ingeniosa, con muy buenos diálogos, que hacen sonreír y reír al respetable. Sirve para que conozcamos a los diversos personajes y su interrelación en la trama.
Sin embargo, ay, poco a poco va perdiendo fuerza y se hace algo reiterativa en sus discursos acerca del más allá y del más acá, de la fuerza de la atracción entre dos personas, del amor, del engaño...todo bajo muy estimables diálogos, marca de la casa Allen, pero que no sirven para elevar el interés, antes al contrario, este se va perdiendo poco a poco.
Menos mal que su parte final, los últimos veinte minutos, creo que bastante alargados, mejoran, para dejar un poso de simpatía, de dulzura, vamos, que no deja mal sabor de boca a pesar de que no se haya visto un film redondo ni mucho menos.
Para mi sorpresa, fotografía a toda pantalla, muy bonitos paisajes franceses y unas insignes interpretaciones no solamente de la excelente pareja protagonista, que se complementa a la perfección, sino de los "secundarios", destacando a la muy veterana y siempre soberbia Eileen Atkins.
En definitiva, que no se recordará como uno de los mejores trabajos de Allen, pero sí que está hecha con esmero y amor al cine y a la magia que despierta en el espectador

Excéntrico thriller que consigue sorprender al espectador no pocas veces, aunque, bajo mi punto de vista, no siempre de forma convincente.
La historia está bien y su comienzo y final son brillantes. El comienzo, con una sabia e hilarante mezcla de cine puramente noir policiaco con notables escenas de humor, en un contexto siempre serio e incluso trágico, pero que por medio de "marcianadas" a cargo del director y siguiendo su propio guión, consigue escenas tan fascinantes por su impacto visual como el ocurrido en la primera incursión de los policías en una redada presuntamente sencilla en una peluquería. Nos quedamos sencillamente con la boca abierta.
Empero, poco a poco la historia se torna más oscura, y el espectador se va desprendiendo de la trama al resultar esta un tanto confusa, deslavazada, al menos en una primera impresión. Cuesta seguir el ritmo y la forma de contar la historia, muy personal del director/guionista.
Es indudable que tiene, repito, aciertos formales y una buena interpretación del protagonista, pero en líneas generales no es menos cierto que no es un film sencillo, resulta muy oscuro en todos los sentidos y al final el espectador medio se queda perplejo. Esto, por supuesto, no tiene que ser necesariamente negativo, pero sí revelador.

Aunque mediocre y muy poco vista, a mí me pareció una muy entretenida producción húngara, eso sí, con intérpretes internacionales, de lo más extraños en cuanto a mezcla se refiere. Hay de todas las nacionalidades.
El argumento puede resultar un tanto difícil de seguir al comienzo, pero poco a poco creo que las piezas encajan y tampoco se le debe exigir seriedad en cuanto a hechos históricos.
Aquí lo que más importancia tiene es la intriga criminal, que creo está lograda.
Buena fotografía y aceptable ambientación.
La dirección es televisiva, sí.

Entretenido film biográfico (al menos en su vertiente luchadora por los derechos de los/as trabajadore/as) de César Chavez, figura tremendamente importante aunque hoy igual ya casi olvidada.
Y Diego Luna, su realizador, se ha propuesto, junto a mucha más gente, a que no se le olvide, creando esta película que resulta amena aunque ciertamente plana en algunos momentos, como si de un buen telefilm se tratara.
Resulta interesante en todo momento, aunque sea en su vertiente histórica, no tanto en su línea argumental y en sus interpretaciones, que resultan desiguales, aunque su protagonista Michael Peña, un habitual Hollywood y la de John Malkovich, en un papel que le viene al dedo, sean entusiastas y estimables.
Con todo, hay buenas escenas y el espectador creo que sí toma conciencia de quién fue este hombre y lo que representó.
En definitiva, que no está nada mal, se pasa bien el rato, aunque ciertamente no cala en nuestros corazones al no haber mucha imaginación en la puesta en escena

Basada en un cuento popular japonés anónimo
del siglo IX, "El cortador de bambú", se trata de un film realizado por el creador de la singular "La tumba de las luciérnagas".
Esto podría significar casi con toda seguridad que será una gran obra, pero la realidad es que se trata de un buen film de animación lleno de lirismo y fantasía, pero bastante irregular, más de lo que, al menos yo, hubiera preferido.
Existen momentos sublimes donde la unión de música, y fondo y forma, dotan de emotividad a la historia, pero también otros en los que existen algunos momentos, no extensos, muertos, o al menos sin la suficiente entidad.
No obstante, nunca se le pierde la cara y siempre resulta conmovedora, con sus gags humorísticos y momentos llenos de pasión. Pero también hay veces en los que no ocurre nada verdaderamente significativo y recordable.
En definitiva, una buena película, pero no mayor para ser del maestro Takahata.