La forma de presentar el film me llamó mucho al ser deprimente el escenario a pesar de contar con el maravilloso lujo de un hotel de New York. Ambiente tétrico, desolado, un pasillo negro…el resto es para echar a volar la imaginación en cualquier amante del cine de terror. Las secuencias me parecieron acertadas llevando un orden lógico y demencial durante la mayor parte de la cinta. Tiene algunos fallos sobre todo la elección de Cusack (me sigue costando verle en este tipo de papeles) aunque quizá sea ese su mayor acierto aunque suene contradictorio. Su falta de expresividad en algunos momentos es digna en la trama que cuenta la película al buscar (supongo) un actor que diera esa pasividad que reflejara el estado que debía tener su personaje.

Me pareció una cinta interesante con fallos evidentemente. No es de las mejores que haya visto, pero tampoco de las peores. Cumple su objetivo y eso es loable para los cientos de films que existen que no llegan a nada, esta por lo menos entretiene dentro de sus posibilidades; pero como siempre digo: “Cuestión de Gustos”

El conjunto elenco más música más ambiente, estuvo bastante correcto. Le faltó quizá intentar hacer algo más efectivo menos conservador desde el punto de vista riesgo. Pudieron haber puesto más escenas escalofriantes y menos argumentos porque no necesitaba demasiada explicación de que iba…allí también fallo aunque como he dicho, no llega a ser del todo mala.
Película para ver y entretener sin más. Con sus fallos cumple lo que quiere (supongo) su director que es traer un tipo de miedo psicológico que encierra un juego que se convierte en peligroso pero como siempre digo: “Cuestión de Gustos”

Una verdadera obra maestra mostrando el lado más humano dentro de una de las peores etapas de la humanidad durante el Holocausto Nazi. Esa forma de rodaje le da un impacto visual único en una situación donde los seres humanos cobran ese espiritu de ayuda a otros, donde se muestra el lado más duro de una guerra.

Una verdadera joya del cine.

Cabe destacar las precisas y convincentes actuaciones de sus personajes principales donde Ralph Fiennes hizo (desde mi punto de vista) una de las mejores interpretaciones que he visto de este excelente actor, dándole ese punto de seriedad a su personaje que me involucró con toda su historia. Quizá el fallo que encuentro en este film es la duración del mismo pero no es inconveniente para disfrutar de una cinta preciosa y estéticamente especial y la cual recomiendo para los que busquen profundidad en una trama como está. No la considero “Cuestión de Gustos” sino de obligado visionado para entrar en una época vista desde una puesta en escena distinta.