Podeis parar ya de leer, me he dejado todas la neuronas en el título.


Me llamó la atención mientras veía "Si la cosa funciona" que los personajes que Woody retrataba en pantalla eran demasiado extremistas para ser reales. Al principio lo tomé como un fallo, una manera fácil de llevar la historia y la carcajada a la sala, una forma muy maniquea y simplona de tratar a los personajes, poco característica de la "Visión global" que Boris presume de poseer.

Entonces me paré a pensar y dije: "Woody sabe de esto, no es tonto, sabe que todo eso resulta forzado y poco creible, está muy lejos de ser un amateur" Entonces le di más vueltas y llegué a la conclusión de que era necesario.

Necesario porque a raíz de ese supuesto simplismo la cosa funcionaba, es como si la filosofía de vida que Boris plasma en pantalla sirviese a Woody a su vez para realizar la película.

"Quiero contar que el marco socio-cultural en el que nace una persona influye de manera total en las decisiones, ideologías y actitudes que esa persona realiza a lo largo de toda su vida; o que por mucho que nos esforcemos en encontrar la pareja ideal o el trabajo perfecto no somos más que esclavos del azar"

Se podria haber hecho de otro modo pero Woody dice, "Si la cosa funciona..." y nos presenta a unos personajes y unas situaciones que por sus caracteristicas son muy llamativos y casi irreales pero que le vienen como polla al culo para explicarnos eso. Perfecto. ¿Qué más da que sean maniqueos mientras muestren claramente y sin lugar a ninguna duda lo que quiero contar? Al fin y al cabo, ¿no es para lo que se hacen películas, para contar cosas?

Una filosofía práctica, como la vida misma.

Tengo un hijo.

No sé cuidar de mi misma. Tengo un hijo. Le inspiro mis miedos y frustraciones. Poseo un hijo. Descargo toda mi rabia acumulada en él. Estoy enamorada de un hijo. Le enseño a ser un desgraciado. Soy un hijo.

Tengo una madre.

Me gusta besar a mi novia. Tengo una madre. Me apasiona la música y hablar con mi abuela. Poseo una madre.Agacho la cabeza, olvido y voy muriendo . Estoy enamorado de una madre. Engaño a los demás y por extensión a mi mismo. Soy una madre.

Carne de su carne, sangre de su sangre, ¿para qué tienen hijos los irresponsables?

Inner battle


Hemisferio este, a hemisferio oeste y viceversa:

-¿Quién eres, tío? No me suenas.

-Soy el sentimiento de rechazo de Jack, encantado.

-No se te ve mucho por aquí ¿todo bien?

-Sí, para mi sí, estoy acostumbrado a lidiar con ello, pero creo que tú tienes problemas, man.

-Vaya con la bromita, desenfunda

-¿Recuerdas hace mucho tiempo la guerra que libramos por el control del tipo éste? Fue cruenta, fue lenta y dolorosa, tú ganaste por desgaste, guerra de guerrillas que le llaman.

-Vaya, ahora que lo dices es cierto, recuerdo aquello, lo raro es que se me había olvidado...¿Has leído a Freud? Dice algo así como que los sucesos que nos causan un fuerte trauma tendemos a olvidarlos, a quemarlos, tuve a las chicas trabajando all night long y al final lo conseguimos.

-Bueno, pues resulta que me he escapado, bueno, me han liberado, y ahora tenemos que convivir.

-Bueno, mientras compartamos los gastos...

-Donde dije convivir quería decir vivir, yo, para ser más exactos, tienes 24 horas para marcharte, ya has chupado bastante, farsante.

-Bueno, por lo menos déjame recrearme con un último viaje feliz, porque, recuerda, por lo menos conmigo lo fue.

-De acuerdo.

Y arranca el encuentro, vemos que Leo se desenvuelve bien por su zona, ni incomoda ni se ausenta, está correcto en el terreno, como siempre practica el juego limpio. (...)

Atención porque vemos al crack asistir a sus compañeros con mucho rigor y precisión, parece que se entiende especialmente bien con uno de ellos, se dan un cachetazo en el culo. (...)

El árbitro le recrimina una pequeña falta, Messi, con buen juicio, calla y asiente, aunque algo ronda por su cabeza y no es la pelota precisamente. (...)

Parece negado cara al gol y vemos a sus compañeros darle siempre los mismo pases imprecisos e inútiles que sólo llevan al juego plano y no a la verticalidad, parece que ha perdido la ilusión por buscar puerta. (...)

Menuda entrada que le realizan al astro argentino. El colegiado se hace el ciego y le dice que se levante, Lionel está totalmente indignado y habla con Pep, que le dice que se calme y siga el juego, que quizás no era para tanto al fin y al cabo. (...)

Messi empieza a practicar el arte del piscinazo en el área rival, el árbitro le amonesta por intentar engañarle y Leo se lleva las manos a la cabeza (no a "él" sino a su cabeza) no pudiendo creer la decisión del referee. (...)

Gol del equipo rival, Pep cambia a Messi y éste se lo recrimina con patadas, empujones, lloriqueos y berrinches. (...)

Salta al campo en medio del partido y el árbitro le expulsa. Podemos leer en sus labios algo así como: "Sé quien os ha pagado, estais todos compinchados, os vais a cagar, no me rendiré". Algunos jugadores del Barça se dan la vuelta y ríen a escondidas, pero Leo les ve, claro que sí (...)

Al final, en el último minuto le pega una patada al cristal del banquillo, se lesiona para el resto de su carrera y todo el Nou camp aplaude emocionado su retirada: "Messi, Messi, Messi..." mientras él masculla: "Hijos de puta, yo no soy Messi...soy Trelkovsky, asesinos, cobardes, vendidos, corruptos..." (...)

Fin de la retransmisión

John Dillinger, el hombre de los huevos de oro, qué crack, qué macho. Para él todo es coser y cantar, ¿que hay que liberar a todos mis colegas de la cárcel? se hace con la punta, ¿que estoy aburrido? me meto en la comisaría para darle un poco de emoción a mi vida, nena. Porque tú eres mía, soy el ladrón más buscado del país y tú eres mía, porque yo lo digo, ya te has enamorado de mi ¿ves? ¿para qué te resistes a mis encantos si YO ya te he elegido?

Mis amigos en realidad importan bien poco, no te vas a acordar de ellos, muchos nombres complicados e incluso sus caras se parecen entre si, y entre la pólvora y el párkinson del que maneja la cámara digitalmente, no vas a distinguir a ninguno, así que te va a dar lo mismo quien muera o deje de morir, quien se escape o me ayude a robar el siguiente banco.

Y no te preocupes de la pasma, muñeca, no tienen nada que hacer contra el todopoderoso John, son todos unos inútiles de tres pares de narices, incluso el coprotagonista, cuyo papel está tan poco cuidado que te olvidarás de él constantemente.

Joder, no sé que esperas a caer en mis brazos despues de más de dos horas de insufrible petardazo genérico, mejor me busco a otra que sepa apreciar más mi cara de niño bueno y mi espíritu rebelde, zorra.