La película cuenta cinco relaciones de parejas con pasiones sexuales distintas y distantes. Mantienen en común que todas ellas buscan el método de sentir la pasión y el deseo por el sexo.
La primera el morbo le llega en el momento en que el personaje ( Natalia de Molina) siente una atracción especial cuando la atracan y nota en su cuerpo unas sensaciones de placer inmenso. El compañero buscará los motivos para que se den las situaciones parecidas y que su chica se corra de placer con su persona, pero para ello se ha de hacer pasar por atracador o violador.
La segunda pareja( Paco León, director y actor de la cinta) quiere encontrar el camino del placer porque con los años pasados parece que el desgaste del tiempo les ha dejado sin respuesta sexual a su vida. Para encontrar la solución, van al médico con la intención de descubrirse y contar sus vivencias o carencias sexuales y el modo de superar la inapetencia sexual.
La tercera( Luis Bermejo y sus actuaciones de una consistencia y un temple maravilloso) pareja mantienen una relación distante. La relación sexual es nula, porque ella está en constante mal rollo por su situación de impedida. Pero el marido se niega a tirar la toalla y realizará lo que sea con tal de disfrutar de su mujer. Aunque para ello tenga que anestesiarla para jugar sexualmente con ella mientras está dormida.
La cuarta pareja ( Candela Peña con su solvencia acostumbrada) está harta de tener relaciones sin que den fruto de embarazo. El problema está en que no hay demasiada pasión en el coito y buscarán motivos para la apetencia, aunque estos sean de un calado extraño.
Por último, la quinta es una solitaria ( Alexandra Jiménez) que muestra placer con los tejidos y solo con tocarlos ya se corre de gusto. En definitiva, la cinta muestra unos casos de rarezas sexuales que no lo son tanto porque lo que se busca es promover la chispa del juego sexual.
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