Haz click aquí para copiar la URL
España España · Salamanca
Voto de La Maga:
2
Terror. Comedia Los Ángeles. En una noche de luna llena, algo que surge de entre las tinieblas hace que los hermanos Ellie (Ricci) y Jimmy Myers (Jesse Eisenberg) caigan por un barranco. Aunque logran salvar la vida, ya no volverán a ser los mismos. De repente, descubren que poseen una fuerza sobrehumana, que sus sentidos se han potenciado al máximo, que ejercen una irresistible atracción sobre los demás y que experimentan nuevos impulsos. Desde ese ... [+]
21 de junio de 2007
7 de 7 usuarios han encontrado esta crítica útil
Wes Carven (Scream) fabrica un producto ideal para aquéllos que suelen dar la tabarra en el cine.
En Hollywood una pareja de hermanos que han perdido recientemente a sus padres son atacados por un hombre lobo. Desde ese momento ambos deberán luchar contra algo totalmente incontrolable: su insaciable apetito en las noches de luna llena. Aunque no lo crean, ésta es toda la profundidad que encontrarán en la última revisión acerca del mito del hombre lobo.
Referentes del despropósito
El último trabajo de la pareja formada por Wes Craven y su guionista más exitoso, Kevin Dawson crece Williamson, culpable también del libreto de Scream, está más cerca de Un hombre lobo americano en París (1997) que de Un hombre lobo americano en Londres (1981), referente de culto y de calidad. Pero es que ni eso. Es la peor lectura que se haya hecho de los licántropos en mucho tiempo, un despropósito en el que ni siquiera los efectos especiales producen terror alguno, y por la que Wes Craven merece que sus seguidores le den la espalda por un largo período de tiempo. Sólo cuando la película recuerda al tono de Teen Wolf, es decir, cuando los hermanos de turno ganan en sex-appeal, es cuando el espectador puede soltar las únicas carcajadas de la función. Diálogos malísimos, desarrollo deslavazado, personajes arquetípicos y lineales, y un final que deja bastante que desear. Y si hay que salvar algo, tal vez tres secuencias: la persecución en el garaje, los primeros síntomas de la maldición en la oficina y la transformación del indefenso perrito. Pero nada más, no busquen nada más porque no lo encontrarán.
Cuando la película comenzó a rodarse, el reparto incluía a otros actores. Despedidos, se rodó de nuevo prácticamente toda la película. No es de extrañar viendo los resultados. Por suerte, la época en la que casi todo el mundo proclamaba a Kevin Williamson como el nuevo rey del cine de terror ha pasado a mejor vida. Este fiasco lo corrobora. Los amantes del cine de terror será mejor que se olviden del asunto, ya que los sustos resultan totalmente previsibles, basándose todos ellos en la repentina aparición de una persona en la pantalla o en mostrarnos a criaturas que, en teoría, tendrían que causarnos verdadero pavor. Del director mejor no hablar, pues Craven emplea todo tipo de convencionalismos a la hora de intentar que el espectador se quede agarrotado en su butaca, algo que no consigue en ningún momento. Lo peor de todo es que utiliza tomas muy breves en algunas secuencias de acción, no sé si para apuntarse a una moda o para ahorrar algo de dinero en los efectos especiales.
La Maga
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow