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Voto de Felipe Critic:
6
Ciencia ficción. Aventuras. Fantástico Muchos años antes de conocer a Luke Skywalker y la Princesa Leia, en una galaxia donde impera el caos y existen numerosas bandas criminales, el joven Han Solo consigue huir del planeta Corellia, pero atrás queda su amada Qi'ra, y Han promete volver a por ella algún día. Tras apuntarse a la Academia Imperial para ser piloto, Han conoce a un wookie llamado Chewbacca y más tarde al famoso jugador Lando Calrissian, dueño del Halcón ... [+]
4 de agosto de 2018
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Desde sus primeras señales de vida, se ha especulado bastante sobre la producción “maldita” que ha tenido que soportar la más nueva apuesta de Star Wars estelarizada por Alden Ehrenreich, que aunque si maltrató contundentemente el producto final por el impactante y súbito reemplazo de realizadores, por los incomprobables rumores alrededor de las dudas interpretativas de la joven estrella principal, unos ligeros y notables reveces en el guion y una lacerante proximidad en las fechas de estreno tanto con el polémico filme de Rian Johnson como con el del par de hits de Marvel Studios; quien sea que debía responsabilizarse del difícil trabajo de finiquitar e intentar perfilar lo mejor posible el material grabado por el dúo de directores Phil Lord y Christopher Miller— acreditados demencialmente como productores ejecutivos, —tendría que aguantar un enorme peso sobre los hombros, posiblemente uno de los más grandes que ha podido existir en el último lustro con respecto a un accidentado mega-proyecto. El oscarizado Ron Howard se ajustó los pantalones y dio un paso adelante, aceptó coger las riendas dando todo de sí para congeniar el estilo más improvisatorio y humorístico de los anteriores directores con sus inclinaciones más dramáticas e independientes; por supuesto que ha conseguido un filme digno de ver, pero suficientes obstáculos hay en el camino para afirmar que esta no debía ser la película oficial que nos hablara del ya clásico personaje interpretado por Harrison Ford.

El guion que corre a cargo del veterano en la saga Lawrence Kasdan y su hijo Jonathan Kasdan, siempre basados en los personajes de Lucas, prefiere eludir la típica historia de orígenes, es decir, los escritores se decantan por iniciar desde un punto medio de la vida del titular, lo que subraya que no se nos está contando su vida sino más bien la historia de cómo se convirtió en un icono de la cultura popular, una trama fabricada para el personaje que no cala del todo bien. El peso argumental que se le da al personaje no está bien enfocado partiendo de un lugar predecible, se refunde entre sus posibles direcciones y solamente consigue salir triunfante en un par set-pieces y emocionales escenas dramáticas que son contadas con los dedos de una mano; no se ahonda mucho más allá de lo que ya sabemos y el hecho de introducir nuevos personajes no hace más que hacernos concluir que esta no es la historia del gran Han Solo. Las ocurrencias del guion no son los suficientemente sinvergüenzas y divertidas viniendo de Han, en realidad, quienes se roban dichos momentos son, en última instancia, Lando Calrissian, Qi'ra y L3-37, ni siquiera el Beckett del siempre fantástico Harrelson ni el Dryden Vos de Bettany son fichas que se mueven interesantemente por medio de este puzzle en varias ocasiones descafeinado. No está ese ambiente socarrón y atrayente del Solo de Ford en gran parte por un guion ciertamente ajeno a la nostalgia de los 90 y una interpretación poco carismática.

Alden Ehrenreich no es el Han Solo que esperábamos. Es verdad que el actor de “Hail, Caesar!” no tiene mucho de done aferrarse a la hora de “crear” su personaje, en sí, en lugar de meterse bajo su piel parece ejecutar un bien intencionado pero fallido homenaje al atrayente chantajista y enredador de Harrison Ford, una representación agradable sobre un molde del personaje, aun cuando este lo supera en tamaño. No hay intriga, no hay chispa ni tampoco interés en ver qué le puede suceder a su personaje, el cual, obviamente, no sufrirá tanto como sus acompañantes, sin embargo, uno finalmente termina aceptando su pícara sonrisa y su limitado carisma.

Exclusivos son los que tienen el poder y la experiencia para juzgar la fotografía de un avezado y no por nada nominado al Oscar Bradford Young. Es verdad que no hay muchos colores vivos en los cuadros y en ocasiones puede resultar farragoso tratar de entender qué es lo que esta pasando en pantalla debido a la paleta de colores opacos, ocres y grises, pero Young intenta incursionar en nuevos campos con nuevas técnicas para así dar una personalidad definida a una historia que narrativamente se queda corta o, más bien, enredada; según dicen, los problemas con la proyección de su trabajo se le atribuyen a la mala calibración de los proyectores, no aptos o incapaces de mostrar en pleno esplendor la iluminación exigida por el filme. Tal como sucede con el guion, las secuencias de acción y, en general, las de desarrollo del primer, segundo y gran parte del tercer acto, las imágenes no son tan agresivamente magnéticas y maravillantes como las de “The Last Jedi” o “Rogue One,” no obstante, en los últimos minutos disparan una tras otra escenas para el recuerdo, ángulos específicamente inteligentes, tonalidades aun oscuras pero contrastadas con una luz perfecta y movimientos de cámara capaces de reavivar la esperanza demuestran nuevamente lo mucho que esperábamos de la película. A pesar de esto, vale la pena deleitarse e intentar dar con el propósito del cinematógrafo de “Arrival” con su estreno más comercial.

“Solo: A Star Wars Story” dirigida por Ron Howard— y todos sabemos que por Phil Lord y Christopher Miller también —es la entrada más lábil, escabrosa y polémica en todos los campos de trabajo dentro del canon cinematográfico de Star Wars. Adolece de energía y dirección, adolece de una interpretación digna del papel titular, adolece de magnificencia visual y sonora, un tono adecuado y personalizado que diera a este personaje más que una sencilla historia heist. Las mejores fantasías y deseos de los Warsies se condensan en unos quince minutos que, aunque no consiguen levantar el peso muerto de más de dos horas de este irregular western espacial, inyectan esperanza para no dar por perdido el gran potencial de los siempre controversiales spin-offs de la franquicia de ciencia ficción por la que la ciencia ficción actual se conoce.
Felipe Critic
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