Después de la gran expectativa generada por esta película surgió un fenómeno por demás interesante: la crítica especializada emitía la opinión casi unánime de que la película estaba muy por debajo de lo esperado, dándole una calificación reprobatoria en casi todos los medios dedicados al séptimo arte. Por otra parte, y para hacer todavía más sui generis la aparición del filme, se inició un movimiento entre los “verdaderos fans de los cómics” quienes defienden a capa y espada la película, propinando improperios en contra de la crítica especializada y manifestando que se trata de “la mejor cinta de superhéroes de todos los tiempos”. Así, parece que el divorcio entre los fans de los cómics y la crítica especializada está destinado a perpetuarse. No obstante, cabe señalar que el resultado es EXCELENTE, ya que se trata de una película que se apega fielmente a las historietas en las cuales se basan sus personajes, llena de referencias y guiños a tópicos clave del universo de DC que expanden de manera impresionante su potencial para crear una saga de época que hará justicia a sus miles de seguidores.

El personaje de Superman siempre ha tenido un problema: ¿Cómo hacer vulnerable a un ser que es todopoderoso? Todo mundo conoce la “kriptonita” pero sería muy burdo el emplear un arma elaborada con dicho material para atizar al héroe durante tres horas o centrar toda la película en una pelea con supervillano. Se trataba más bien de mostrar como los humanos podían hacer daño al héroe y la solución de Zack Snyder es fabulosa (y apegada al cómic), ya que el gran temor de Superman siempre ha sido el no poder proteger a sus seres queridos. Por lo tanto, es un extraterrestre que puede ser atacado si se busca su parte humana, y que empieza a contrariarse cuando los seres a quienes intenta proteger se vuelven en su contra señalándolo como un “falso dios”, “un alien”.

Por otra parte está el mítico Batman, en principio y a pesar de que resulte muy divertido victimizarlo con “memes”, resulta que Ben Affleck hace un excelente papel como el caballero de la noche. Así, se muestra a un personaje mayor de edad, agotado de luchar en contra del crimen que azota a ciudad Gótica, y que por una serie de circunstancias se da cuenta de que Superman es una amenaza para el mundo, la cual debe ser erradicada. Es un héroe que se hace a sí mismo, un humano común que debe de entrenar y valerse de toda la tecnología que está su alcance para enfrentar a un alienígena al cual, a pesar de ser invulnerable, no le teme. Cabe señalar el especial cuidado que se tuvo en que los instrumentos y vehículos del superhéroe se apegaran de manera impecable al cómic.

La actuación de Jesse Eisenberg (The Social Network) como Lex Luthor es excelente debido a que no fue él quien imprimió su personalidad de sínico y prepotente hombre de negocios al personaje, sino que fue elegido precisamente para interpretar a un villano al cual se le dio una faceta distinta para evitar ahondar en explicaciones acerca del origen de su sed de poder, haciéndolo bastante creíble con la forma en cómo fue plasmado en la cinta. Así, se presenta a un Lex Luthor (II) excéntrico, despiadado y muy inteligente que logra manipular a los seres más extraordinarios del mundo, con pasajes que hacen que uno recuerde al Joker interpretado por Heath Ledger. En cuanto al resto de los personajes, hay que resaltar que Gal Gadot (Fast & Furious 6) promete bastante como la nueva Wonder Woman. Por otra parte Amy Adams (American Hustle) regresa con el papel de Lois Lane para “cumplir”, mientras que el excelente Jeremy Irons (The Mission, Reversal of Fortune) caracteriza muy bien al fiel Alfred. Desafortunadamente la película no da para que Kevin Costner y Lawrence Fishburne tengan un papel más relevante en la historia.

El punto débil que tiene la cinta es el mismo Superman, el gran problema que ha tenido la crítica con este personaje es que no se ha encontrado la forma de caracterizarlo debidamente en la pantalla grande. Parece que Zack Snyder no logra que Henry Cavill se convierta en el superhéroe más grande de todos los tiempos, mostrando a un personaje unidimensional que parece que únicamente está ahí para “verse bonito” mientras suelta golpes. Así, aunque la idea de atacar la vulnerabilidad “humana” del kriptoniano es excelente, resulta un tanto exagerado que se le muestre como una persona fácil de manipular y que cede fácilmente a sus impulsos egoístas, con poca capacidad de planeación y raciocinio que al final logra salvarse de que Batman le propine una paliza por una cuestión meramente circunstancial. El resultado es que al final, quien se roba el protagonismo (y quizás el liderazgo de la Liga de la Justicia) es Batman; de hecho, la película parece más una nueva historia de Batman que una continuación de Man of Steel.

La trama lo mantiene a uno atento en todo momento, no hay espacio para bromas absurdas o diálogos inútiles. Se trata de un mundo obscuro y decadente que absorbe a los personajes y que los lleva a un enfrentamiento final con resultados inesperados para todo el público (excepto para aquellos que conocen perfectamente cómo fue que apareció el personaje de Doomsday en las historias de DC). Por otra parte, las escenas de acción son excelentes y muy bien llevadas, lo cual hace que la película sea bastante entretenida para propios y extraños. Cabe mencionar que la batalla entre ambos superhéroes es de lo mejor que se ha visto en la gran pantalla con otras películas del género, ni siquiera los enfrentamientos entre los mismos Avengers pueden equiparársele. Así, Batman v Superman es un excelente trabajo y el punto inicial de una serie de películas que prometen ser extraordinarias y del gusto de propios y extraños.