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México México · Puebla
Voto de wraparty:
9
Drama En junio de 1971 The New York Times y The Washington Post tomaron una valiente posición en favor de la libertad de expresión, informando sobre los documentos del Pentágono y el encubrimiento masivo de secretos por parte del gobierno, que había durado cuatro décadas y cuatro presidencias estadounidenses. En ese momento, Katherine Graham (Meryl Streep), primera mujer editora del Post, y el director Ben Bradlee (Tom Hanks) intentaban ... [+]
21 de febrero de 2018
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La Guerra Fría vuelve a dar de qué hablar en este año cinéfilo, si bien Del Toro presentó un relato fantasioso valiéndose de la lucha entre potencias para revelar como este tipo de conflictos victimizan a inocentes (en su caso fue una creatura acuática), Steven Spielberg hace un llamado a la libertad de expresión y la manipulación política que está detrás de los movimientos armados. En este caso, el suceso específico es la Guerra de Vietnam y la forma en cómo salieron a la luz una serie de documentos del Pentágono que revelaban que el mismo gobierno estadounidense estaba consciente de que la incursión en el país asiático era un desastre condenado al fracaso.

Eisenhower, Kennedy, Lyndon Johnson y por supuesto Richard Nixon quedan evidenciados en una cinta basada en hechos reales. Después de un remordimiento de consciencia, un funcionario estadounidense filtra los documentos al New York Times cuya revelación ocasionará que el gobierno intente censurarlo. Una vez bloqueado el diario neoyorkino los papeles llegarán a Ben Bradlee, el editor de un Washington Post obligado a hacer públicas sus acciones para seguir funcionando, y que a través de su nueva presidenta enfrentará la disyuntiva de publicar el mismo material y asumir el riesgo de correr con la misma suerte de su gran competidor y perder a un gran número de inversionistas potenciales, situación que podría llevar a que la empresa se declare en banca rota.

Para relatar una historia de este calibre, nadie mejor que Spielberg para sentarse en la silla de director, quien hace gala de su maestría para llevar con un ritmo excelente una historia que logra enganchar a su público desde los primeros instantes. Con un guion muy bien adaptado por Liz Hannah y el experimentado Josh Singer (Spotlight), los hechos se van presentando de forma puntual para que el espectador entienda la encrucijada que vivió Katharine Graham, una mujer que asumió accidentalmente la presidencia del periódico y quien ante la insistencia de su editor puso valientemente a la libertad de prensa por encima del negocio, asumiendo una decisión que cambiaría el rumbo tanto de su periódico y de la política estadounidense.

Nadie mejor que Meryl Streep (Sophie’s Choice, The Iron Lady) para dar rostro a Kay Graham, haciendo una mancuerna extraordinaria con Tom Hanks (Philadelphia, Forrest Gump), quien interpreta a Ben Bradlee. De esta forma, ambos actores se desenvuelven con la soltura y calidad que les acostumbra, demostrando que pueden asumir sus papeles con total naturalidad y conservando el estilo que les caracteriza y que los ha llevado a ser dos de los actores más exitosos de la época contemporánea, por lo que siempre será un deleite verlos en la gran pantalla y aún más bajo la dirección del “Rey Midas de Hollywood”. Alrededor de ambos se suma un reparto muy bien seleccionado y dirigido que funciona como el complemento perfecto para una gran película.

La crítica al gobierno y la voz a favor de la libertad de expresión siempre serán oportunas y bienvenidas. Spielberg tiene las tablas suficientes para hacerlo e incluso dejar de lado el mito alrededor de JFK, exponiendo los hechos de forma real desde el punto de vista del periodismo, sin exagerar en juicios de valor. De esta forma, se pone más énfasis en la libertad de prensa y el temple de Graham que en el proceso legal que tuvieron que enfrentar ambos periódicos mano a mano, para llegar a un desenlace que desembocará en el escándalo del Watergate, como si se tratara de un preámbulo de la excepcional setentera All the President’s Men estelarizada nada menos que por Dustin Hoffman y Robert Redford. Así, el director maneja con maestría dos temas de alto calado entre la sociedad estadounidense: la libertad de prensa y el empoderamiento de las mujeres en una película que sin duda vale muchísimo la pena ir a ver.

Calificación: TÚ DECIDES.
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