Es cierto: probablemente es la mejor comedia romántica de los últimos 30 años, y eso a pesar de que Harry y Sally "se odian con todo su corazón......".

La película va, (y me gusta eso) de cómo esos encuentros casuales de la vida en los que encuentras a tu media naranja en los que, cuando se están produciendo, ni por asomo puedes imaginar cuánto van a pesar en tu vida. Es mucho más adelante, al volver la vista atrás, cuando realmente averiguas todo lo que han significado.....

Había visto infinidad de veces la famosa escena en que Meg Ryan finge el orgasmo en la cafetería, pero nunca la había ligado con el resto de la película. Simplemente, por esa escena, ya merece la pena ver la película. Pero no sólo de esa escena vive la película: buen guión, buenos actores, y, como no podía ser de otra manera, spoiler......