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España España · Valencia
Voto de Carorpar:
4
Serie de TV. Thriller. Drama. Intriga 6 episodios. Ambientada en la plataforma petrolera Kinloch Bravo, ubicada frente a la costa escocesa en las peligrosas aguas del Mar del Norte. Cuando la tripulación debe regresar al continente, una niebla misteriosa y envolvente se abre paso y se encuentran aislados de toda comunicación con la costa y el mundo exterior.
22 de enero de 2023
7 de 9 usuarios han encontrado esta crítica útil
Con la mitad de episodios y sin el componente sobrenatural —o preternatural—, «La plataforma» podría haber funcionado como «survival» en alta mar. Claro, que sus responsables habrían tenido que trabajar la claustrofóbica tensión argumental inherente a las premisas geográficas —una plataforma petrolífera que pierde el contacto con tierra firme— y profundizar en los personajes, en sus motivaciones y contradicciones, más allá de la sempiterna turra de la diversidad y del igualmente trillado melodrama con niño muerto. «Qué pereza», debieron pensar. «Mejor metemos unas esporas con eras geológicas de experiencia asesina. Y helechos, muchos helechos».
El resultado, era de esperar, no tiene ni pies ni cabeza. «La plataforma» constituye un batiburrillo indigesto de ecoterror «woke» con tímidos ribetes lovecraftianos. En esto último encontramos una prueba ilustrativa del gran problema subyacente: la serie se queda a medio camino de todo. Y precisamente con el escritor de Providence, o su universo, las medias tintas no valen. El horror cósmico exige ir con todo, aun a riesgo de incurrir en escenas algo —muy— pasadas de rosca, especialmente en los desenlaces. No parece casualidad, por tanto, que sea durante el «season finale» que he dado las cabezadas más profundas, estentóreos ronquidos incluidos. Ni siquiera los efectos digitales alcanzan unos mínimos de calidad, lo cual, habida cuenta del actual estado de la tecnología audiovisual, se antoja particularmente grave.
Al frente del reparto tenemos al veterano Iain Glen, con un indisimulable rictus de querer estar de vuelta en los Siete Reinos. A media función se le une otro ex prócer de Poniente, un Mark Addy que también ha vivido tiempos mejores. Sólo Emily Hampshire merecería subirse al bote salvavidas, y ello merced a un trabajo más voluntarioso que brillante. Del resto del elenco, multicolor y omnisexual cual póster de Benetton, cabe decir que esa feraz vegetación devónica salida de no se sabe bien dónde entrega una interpretación de mayor veracidad. Porque son una desvaída banda de acelgas.
Carorpar
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