No dudo que allá por el 1982, esta película fuese escalofriante. Un grupo de amigos poseidos en una casa apartada del mundo; sangre, visceras y fluidos ¿Qué más se puede pedir?

Hoy por hoy, en pleno siglo XXI y con todos los medios técnicos a nuestro alcance, "Posesión infernal" se queda corta, que digo corta, se queda a años luz de cualquier película que se englobe dentro del género de terror.

Para aquellas personas que sufrieron de pequeños viendo esta terrorífica historia, comprendo que la recuerden con gran cariño, ya no por su calidad, si no por los recuerdos, y los miedos que le traen a la mente, pero cuando estás un poco más crecidita y la ves por primera vez, la cosa no funciona, o por lo menos no conmigo.

Resultado: Una tarde de risas con una película que de tan mala te hace gracia y hasta diria que entretiene, eso si, para verla una vez y ya no más.