He aquí la cuestión, ¿hasta donde algo es real o simplemente es una realidad disfrazada? Tim Burton, uno de mis directores favoritos sin ninguna duda, opta por llevarnos una vez más a un mundo de fantasía en el que una persona normal puede codearse con gigantes o enfrentarse a brujas que predicen tu muerte, desafiar todas las leyes naturales por bosques embrujados donde hay misteriosas sirenas o incluso lluvias capaces de llevar tu coche al fondo de un animado mundo acuático. Con Tim nunca sabes lo que puede pasar, pero esta vez te hace ver la vida con otro punto de vista, te enseña que tu vida puede ser un cuento, una historia que nadie olvidará jamás. Sólo él puede enseñarte que tu puedes disfrazar esa vida, exprimir cada momento de ella y sacar todas esas emociones que tenias guardadas en forma de alguna que otra lagrima de felicidad. Te enseña como puedes pasar de ver a una persona normal a verla extraordinaria. Ese es su poder y así lo refleja en esta magnifica cinta, con un reparto de lujo y millones de colores. Sin duda alguna, es una obra de arte de la primera década del 2000. Si queréis más, solo tienes que visionarla. Bienvenidos a un mundo donde todo lo que te propongas puede ser real.