Una película que desde el inicio ya hace figura del empalagoso amor que aportaría, de inicio y casi a término, no deja de aportar momentos inesperados, que te mantienen pensando cómo se resolvería... tal vez Jenifer Love pueda estar muy sobre actuada a su papel, siendo manipuladora e ingenuamente complaciente al mismo tiempo, tal vez si no jugara mucho con sus ojos y ciertos gestos (muecas) no parecería tan fingido.
En el caso de Paul Nicholls, mantiene una impecable actuación, su personaje se acopla muy bien, por no decir se complementa al de su compañera, sin sobre actuar maneja perfectamente el drama, no costándole si quiera llorar (cuando a Jennifer Love por lo visto, no es su fuerte, no convence), no por algo su personaje está en casi en más del 95% del film, no siendo tan melodramático, además de no aportar ese meloso toque rosa de estas películas de amor, sin duda su actuación fue más ejemplar.
Y por último el reconocido Tom Wilkinson, aunque le dio ese toque de seriedad y mente maestra de la historia, creo que quedó muy cortos sus diálogos para mostrar su calidad actoral, su presentación le da ese toque pero por tiempo tan corto no le permitieron ponerle su cereza, nada mal pero no te llena.

En fin, para el espectador que evita anticiparse a la trama y goza del minuto cero durante el film, con seguridad le sacará un nudo en la garganta.

Historia bien contada, algo cursi, una banda sonora y fotografía de gran calidad, y la atmósfera que se mantiene casi inalterable hacen de una película que entretiene, deja la comedia por melodrama en casi su totalidad, con diálogos simples pero algunos muy dulzones pero con detalles que deja uno que otro mensaje de vida, que resaltan que el pasado y futuro son solo parte del tiempo y que el mejor regalo es vivir el presente.... por alguna razón se llama PRESENTE.