Después de ver películas como Fucking Amal o Déjame entrar, el cine sueco tenía bastante buena valoración por mi parte, pero Millennium I tiene de sueco lo que yo de Zulú. Tanto la estructura, como el desarrollo de la trama es más yanqui que otra cosa, porque sueco sólo quedan los nombres y los actores.

Se podría decir que bastante mérito tiene una película que te entretiene durante las dos horas y media que dura, sin necesidad de bostezar, aunque lo que es hacer trabajar un poquito la materia gris ni por asomo. En eso es en lo que más se parece al cine norteamericano, en lo machacado que está todo y calentito, calentito que me lo quitan de las manos.

Se nota que se intenta condensar todo el libro y, aunque es bastante ambicioso al principio, creo que se consigue con cierto acierto, siempre teniendo en cuenta las limitaciones que supone adaptar un best-seller al séptimo arte. Sin embargo, el personaje femenino tan atormentado y tan interesante, se le saca muy poco jugo y hay demasiadas cosas que se quedan en el tintero, todo gira demasiado en torno a la trama enrevesada pero desarrollada como si se hiciera un sudoku casi completado.

No obstante la valoración final estaría entre un 6 o 7, aunque no llega al notable por exceso de comercialidad. A ver si la segunda parte sale mejor...