Soldados de Salamina

Cita:

"Una película admirable que en la parte final me coloca un nudo en la garganta" (Carlos Boyero: Diario El Mundo)
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"Una película hermosa y estremecedora" (Ángel Fdez. Santos: Diario El País)
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"Consigue el milagro de convertir la novela en una genuina obra de cineasta" (Antonio Weinrichter: ABC)
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"Huye del juicio fácil para dibujar el horror de la guerra" (Alberto Bermejo: Diario El Mundo)
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"Soberbios duelos de actores. (...) Logra el reto de verter en imágenes la novela" (Lluis Bonet: Diario La Vanguardia)
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"Una prueba difícil superada con buena nota." (Javier Ocaña: Cinemanía)
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De toda esta bazofia escrita por los que se hacen llamar grandes conocedores del cine, pues su opinión corona las “mejores” publicaciones dedicadas a este mundillo, no se aprovecha nada.
Qué parámetros son los que marcan la maravilla y la estupidez, ¿Los de cada uno? Porque si es así me paso por el forro a todos esos “grandes” que cito al inicio y digo en voz alta y clara. Trueba, hermano pequeño, dedícate a vender pescado en la Boquería.

Soldados de Salamina, es un film mediocre, con una dirección mediocre y unas actuaciones igual de mediocres.
No dudo de la valía de la obra literaria, no la he leído, pero lo que Trueba plasma en la pantalla es un pastiche.
Empezando por la protagonista, decir que Ariadna Gil no se salva ni cuando está en la biblioteca, donde lo único que tiene que hacer es pasar las páginas de un libro, por momentos se excede y en otros se queda corta, y las escenas en las que el director se recrea en su indiscutible belleza resultan vomitivas por lo absurdo del guión.

La secundaria María Botto, da la sensación de que se ha equivocado de rodaje y pone toda la carne en el asador (la verdad es que no tiene mucha) para regalarnos un personaje absurdo y sin sentido, es como un pegote, un lamparón, la culpa no es de ella, sino del “gran director” .

David Trueba debió pensar “Quiero que mi película sea veraz, sea diferente, quiero que los personajes que han vivido la guerra civil sean los verdaderos protagonistas” y va y planta momentos documental de una forma totalmente arbitraria, esto no sería lo peor si en medio de estos momentos no estuviera la “estupenda Ariadna” actuando, rompiendo así cualquier credibilidad.

Si esto es una obra maestra de nuestro cine tendré que agachar la cabeza y darle la razón a un grandísimo usuario, grande en lo personal y grande en lo que a FA respecta, por que me habrá convencido de que el cine español es una mierda