Tan sólo con imaginarme esta terrible y verídica historia en manos de David Fincher, me produce un severo orgasmo, tras verla o lo decía o reventaba.
Este sujeto que inspiró a películas como La Matanza de Texas, es uno de los más perturbados monstruos del siglo XX, resulta realmente increíble que esto ocurriera de verdad.
La película no está mal, el director le da un punto de terror psicológico donde vemos porqué y de que manera actúa Ed Gein, no está bien conseguido, pero tampoco es un desastre.
Es muy poco sangrienta para la semejante barbaridad que nos está contando, y exceptuando la correcta interpretación del actor que hace de Ed, todo roza el suficiente bajo, pero es que te deja tan atónito que te la tragas "del tirón".
Ojalá saquen una película mejor sobre este siniestro monstruo.
Interesante.