Un homenaje a esas labores simples, que hay que hacer, que hoy día dejamos en un segundo plano y que al final son las mas importantes y satisfactorias.
En aquella época lo que hoy dejamos de hacer por falta de tiempo o simple dejadez, se ponía en manos de estas mujeres que por muy poco dinero y con menos reconocimiento aún, incluso de manera humillante, era una costumbre que te subía un peldaño en la sociedad.
La película desde el primer momento te seduce con su colorida puesta en escena, con su vestuario o esos cuidados coches de la época corriendo por los verdes campos, que parecen reciensalidos de "overhaulin". todo fotografiado en un magnífico "technicolor" diría yo y con la perfecta estética de un anuncio de Coca-Cola, pero mostrando la cruda realidad de los hechos.
Si a esto le sumamos la magnífica interpretación de todos, lo que supongo que es en parte obra del director-guionista-productor Tate Taylor el resultado es un rato estupendo sumergido en los 50 recreándote en tus recuerdos y disfrutando de ese buen guión-interpretación.
El oscar a Viola Davis, que se lo merece igual que cualquier otra de las protagonistas, con todos mis respetos yo se lo habría dado a su compañera Octavia Spencer, menos emotivo pero mas encantador. como siempre a la hora de premiar es mejor un papel dramático en vez de cómico,
cuando considero que es mas difícil hacer reir que llorar.