Alejada totalmente de la esencia que su autora destiló en la obra. Aquí se nos muestra una cadencia aséptica, sin calado cinematográfico, desdibujando los personajes hasta convertirlos en una triste caricatura de si mismos.

Hasta la magnífica actriz Judy Dench, ofrece una caracterización de su apetitoso personaje, alojado en la nada. Carece de la más elemental composición. Penélope Cruz muy desfavorecida, melancólica, y actuando como una ratita asustada.

El propio director se asignó el papel principal, pero bajo mi humilde criterio, no será recordada como una buena adaptación de la magnífica obra de Agatha Christie.