A ver, entiendo lo que provoca esta saga en sus fanáticos, pues he de reconocer que me pasa un poco lo mismo con Harry Potter y sus amigos. Lo que no entiendo, es que los seguidores de estos chupasangres light no sepan darse cuenta que hay cosas que por mucho que nos gusten, no son buenas, y en este caso, menos que aceptables.

Este es precisamente el caso de Eclipse, la película es de una mediocridad que abruma, sus diálogos son sosos, actuaciones que no pasarían un taller y un desarrollo inexistente. Es por esto que me sorprende que sus millones de fanáticos no alcen la voz para reclamar lo insultante y decepcionante que resulta ser este film, pues no por ser su fin único entretener, se debe soportar más de dos horas de un producto carente de todo aprecio por el público que paga su entrada. Es más, sus fans deberían ser los primeros en darse cuenta que es un film hecho sin cariño, sólo por cumplir, pues al fin y al cabo, por muy mala que sea, habrá millones que de todas formas llenarán las salas de todo el mundo.

NOTA: Los vampiros son seres de la noche, malignos por esencia, fríos, sedientos y a veces cegados por la sangre, si no, pregúntenle al pobre "Conde Orlock"; los vampiros no son tipos amanerados, que tratan de reprimir los instintos, brillan a la luz del sol y lo peor, se enamoran cual quinceañeras.