No puedo ponerle un diez a esta maravilla de película por dos motivos. El primer motivo es que no creo que ninguna película pueda alcanzar la excelencia, aunque si rozarla como en este caso. El segundo motivo viene por parte de los cambios que se produjeron al realizar la adaptación del libro, aunque los cambios realizados no son para mal.

La banda sonora, compuesta por Elliot Goldenthal y nominada al Oscar, está siempre a la altura de cada escena de la película. No desentona en ningún momento y genera una ambientación sonora inmersiva dentro de la obra.

La fotografía está cuidada al detalle.

La elección de actores es bastante acertada. Es cierto que, inicialmente, Anne Rice no quería en la obra ni a Tom Cruise ni a Antonio Banderas puesto que su parecido con el del libro no tenían nada que ver. Tom Cruise interpretó al vampiro Lestat, quien según la novela era un noble francés de metro ochenta; Antonio Banderas se tuvo que meter en la piel de un adolescente que, evidentemente, acabó cambiando al personaje radicalmente puesto que el malagueño rondaba la cuarentena en aquel entonces. El resto de actores se ajustan como un guante a sus personajes en la novela. Brad Pitt es el eterno atormentado y Kirsten Dunst la eterna niña inmortal, tal cual los imaginas tras leer el libro los ves plasmados en la pantalla.

La historia es un buen relato adaptado al mundo del cine. Es cierto que se cambiaron muchas cosas de la novela, pero la mayoría de los cambios fueron acertados. Desaparecen personajes secundarios importantes, como pueden ser el padre de Lestat o la vecina de Louis, se acortan escenas o se unifican varias para dar más agilidad al filme. Si bien hay cambios que no acaban de convencer, la mayoría están muy bien llevados.

En definitiva, posiblemente una de las mejores películas de vampiros rodadas hasta la fecha. Puede que en algunos momentos se torne lenta o que parezca que vaya a atascarse en algún momento, aunque al final vuelve a tomar el ritmo. La trinidad entre actores, música y locaciones hace que en todo momento nos maravillemos con la apasionante historia que nos cuenta. Además, el guion es bastante sólido, sobre todo en la manera de resolver los cambios añadidos para la adaptación cinematográfica.

Como anécdota final, me gustaría añadir que la mismísima Anne Rice, la escritora de la novela y de la posterior saga vampírica, fue la encargada de escribir el guion para la película y también tuvo bastante control creativo dentro del rodaje:.