Haz click aquí para copiar la URL
España España · Basauri
Voto de SantiGC:
9
Drama Matsugoro, un pobre conductor de carro en el Japón del periodo Meiji, devuelve a un niño perdido, Toshio, a su casa. Sus padres se muestran con él muy agradecidos. Tras la muerte del padre, la madre, Yoshiko, muy preocupada por su hijo, le pide a Matsugoro que le ayude a educarlo. Él acepta encantado. Con el paso del tiempo le coge mucho cariño, al niño y a la madre. Pero Toshio crece, y se marcha a estudiar a la universidad de Tokio, y ... [+]
14 de noviembre de 2020
Sé el primero en valorar esta crítica
Esta es quizás la película más amena que he visto interpretar a Mifune, una película única ya que no he visto otra película similar. No llega a desenganchar en ningún momento, divertida la mayoría del tiempo, y con una gran narrativa audiovisual sin que ello deje de ser en el fondo una película muy compleja por la cantidad de aspectos que van variando a lo largo del metraje, la vida misma.

En ella narra las vivencias de Matsugoro, que se gana la vida como conductor de calesas, poseedor de una fuerte personalidad y vigor que no duda en mostrar en todo momento, y aun así, ese aspecto no llega hacer sombra a su carácter también humilde, feliz y noble. Muy bruto pero con capacidad de obrar sin maldad y resentimiento, un gran mentor en ese aspecto.

Vuelvo a incidir que estamos ante una película muy heterogénea en pautas que van aconteciendo y la forma en se muestran es una maravilla. Pero a groso modo podemos decir que la historia se centra en la vida de Matsugoro y su relación con una familia con la que se encariña, llegando a ejercer el papel de tutor del niño y con la responsabilidad enseñar experiencias de la vida de forma circunstancial y con muchas sorpresas. Que gran escena la del tambor (que suele estar representada en las diversas caratulas que hicieron de la película) en la que saca a relucir su afán en las tradiciones con un ritmo y una fuerza como se debe hacer, en un acto de cariño y dedicación, permitiendo paso a que sigan adelante las siguientes generaciones. Dentro de la película se muestra también el amor que muestra Matsugoro por Yoshiko, la esposa de la familia, que debido a su fuerte sentido de honor y respeto lo sobrelleva, priorizando mantener su secreto por encima de su propia vida.

La moraleja de esta película para mi es clara, pero depende también de quien la vea también. Tenemos potencial para vivir la vida, disfrutarla con nuestras decisiones y decidir como nos afecta todo cuanto surja con el pasar del tiempo, y el personaje de Matsugoro lo ha sabido llevar con plenitud, con la libertad que uno gana cuando uno actúa sin las ataduras de sentirse especial.

Una película que puede parecer de todo menos indiferente, muy recomendable si queréis ver una joya de cine clásico.
SantiGC
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow