Esta película se plantea esta interrogante, y nos enseña que lo verdaderamente importante en la vida son las pequeñas cosas que compartimos con nuestros seres queridos. Un film totalmente enriquecedor desde el punto de vista en que se mire y una pequeña obra cinematográfica latina, a la cual no le hace falta recurrir a una idea exagerada, ni fachendosa para ser entretenida y emotiva, con un guion tan sencillo, como su idea original, se convierte en una verdadera joya debido a sus magnificas interpretaciones (Ricardo Darin, Héctor Alteiro), lo natural y cotidiano de su desarrollo, y lo trascendental de su mensaje.
Es difícil no ponerse en el lugar de los personajes, cuando las situaciones vividas por ellos y sus problemas son situaciones que o problemas que pueden llegar a enfrentar una persona normal y nos trasmiten tal emotividad y sentimiento a través de la cámara, con tan solo una mirada, un gesto, o una palabra “como el poema de la hija a su padre, o la mirada de la novia de Darin al escuchar el sueño de este y darse cuenta que ella no esta en su futuro” Definitivamente el director y el elenco nos trasmiten cada sensación que quieren que sintamos.
Calificación final un 8 una de las mejores sino la mejor película, latina que he visto.