Haz click aquí para copiar la URL
Voto de Pachi67:
9
Serie de TV. Aventuras. Drama. Intriga Serie de TV (2024). 10 episodios. Ambientada en el Japón del siglo XVII, lord Yoshii Toranaga lucha por su vida mientras que sus enemigos en el Consejo de regentes se alían contra él cuando un misterioso barco europeo aparece abandonado cerca de un pueblo pesquero. (FILMAFFINITY)
29 de abril de 2024
3 de 3 usuarios han encontrado esta crítica útil
Hace menos de un mes me había visto la versión de los ochenta de esta serie. Ahora acabo de terminar su hermana renovada y actualizada y no hay color. Esta nueva versión la supera en absolutamente todos los apartados. Es una comparación injusta, lo se. Han pasado 44 años y se notan mucho. La antigua me pareció interesante, seguramente fue un puntazo en su época (yo la vi de chaval pero apenas la recuerdo, ni tenía aún capacidad para asimilarla), con buenos actores, buen presupuesto, vestuario, ambientación. Pero los años no la han tratado demasiado bien, sobre todo después de ver esta nueva versión. Incluso me ha parecido confusa y dispersa en comparación.

En esta Shogun del 2024 casi notas que estás ante algo grande, de calidad, de elegancia y buen hacer de alto nivel desde los primeros minutos. A mi me ha atrapado nada más empezar. Destila poderío, clase y épica de la buena desde los primeros planos. Se nota la pasta, el alto presupuesto y que se ha gastado bien. Empezando por esa fotografía oscura y opresiva que lo envuelve todo, esa atmósfera amenazadora y agobiante, la lluvia y la noche que tan bien casan con ese mundo desconocido donde nada es lo que parece, todo no es ajeno y nos hace sentirnos indefensos, extraños y perdidos. Siguiendo por una ambientación y un vestuario impecables, un plantel de actores que hace un trabajo excelente, con alguna excepción para mi gusto, una factura técnica de alto nivel, una banda sonora adecuada y por supuesto, una buena historia que además, está bien contada, más centrada y clara que en la serie antigua.

Lo que al principio nos parece la historia del piloto inglés John Blackthorne se acaba convirtiendo en un enfrentamiento de egos, de política, de intereses comerciales, de luchas de poder, de intrigas, de traiciones y alianzas, de peleas intestinas sin cuartel, en un juego sangriento donde vamos descubriendo el camino de Toranaga Sama hacia ese título de Shogun. John Blackthorne es más bien un comodín en la historia que nos permite vivirla desde dentro y que añade además ese interesante e intenso choque de culturas, uno de los mayores alicientes de la serie. Podemos sentir porque unos y otros se ven como bárbaros extraños con costumbres desconocidas y amenazadoras. Esa manera de demonizar y rechazar lo diferente tan extrapolable a nuestros días. Blackthorne tiene una misión y unos planes pero acaba siendo como una rama sin hojas arrastrada por las corrientes de un río contra cuya fuerza poco puede hacer. Quizás nadar e intentar sobrevivir a sus traicioneras corrientes que nunca consigue entender del todo y que lo hacen parecer una marioneta. También hay tiempo para el amor trágico en su lucha por la supervivencia zarandeado por la corriente. Aquí los personajes fuertes son los que hacen la historia, los japoneses y su particular juego de tronos: Toranaga sobre todo, Mariko, Ishido, Yabushige, Ochiba No Kata, etc.

Supongo que los que tuvieran preparadas las palomitas y esperaran con impaciencia las batallas de samurais y el brillo acerado de muchas katanas ensangrentadas se habrán sentido muy decepcionados. Poco de eso hay. Alguna lucha bien coreografiada, algún seppuku, algunas escaramuzas y poco más. No la veo como una serie de acción precisamente. Es más bien una gigantesca y dramática partida de ajedrez bastante sangrienta y sin misericordia para el que sale vencido. Con brutal sutileza se van tejiendo trampas, estrategias y todo tipo de intrigas, en medio de la fascinante cultura japonesa, con sus rituales, sus códigos de honor, sus protocolos, su macabra rigidez y filosófica manera de entender la vida y la muerte. Ese será otro problema para los que prepararan las palomitas. Todo se cocina a fuego lento, todo es como una coreografía o un ritual al estilo japonés. Lleva su tiempo y son importantes las formas y el protocolo, sin prisas y con buena letra. Recreándose en los planos, en las situaciones, en la formidable ambientación, en la estética formando un todo con lo que se está narrando. Por mi parte ha sido toda una experiencia y ha sido de esas grandes series que te apena ver como se van consumiendo los capítulos y se va a terminar el espectáculo.

Y aún así no le he puesto el sobresaliente por un pequeño detalle. No me ha convencido Anjin San/Piloto/John Blackthorne/Cosmo Jarvis. Desde el primer capítulo ha sido como una chinita en el zapato que con el tiempo iba haciendo más daño. El actor me ha parecido bastante limitado y tampoco me ha gustado el carácter que le ha dado a su personaje, con un aire algo bobalicón e indeciso. Diría que es el único apartado en que me gusta más la versión antigua de la serie. Me convence más el piloto que interpreta Richard Chamberlain que el de Cosmo Jarvis. Le da un aire más audaz, carácter, presencia, una personalidad distinta que me atrae bastante más. Seguramente intente conseguir la novela en que están basadas las dos series, porque parece ser que está además muy bien por lo que he investigado. Cuando esté leyendo me guiaré sin duda por las imágenes, la estética, la atmósfera, la ambientación, la fotografía y los personajes de esta nueva versión pero como yo seré el que manda, cambiaré a Jarvis por Chamberlain como el Anjin San en mi mente. Y ni el mismísimo Toranaga Sama me lo va a discutir.
Pachi67
¿Te ha resultado interesante y/o útil esta crítica?
arrow